Este próximo lunes 12 de septiembre se acaban las vacaciones de los reyes de la casa, los niños. Toca volver al colegio y reencontrarse con los amigos, los profesores y con su segunda casa, que este verano a diferencia de ellos no ha estado precisamente de vacaciones. Los ayuntamientos se han afanado en estos algo más de dos meses de asueto de llevar a cabo multitud de pequeñas obras y mejoras en los centros educativos para que luzcan sus mejores galas para el inicio del curso escolar. Pero como todo en la vida, no en todos los municipios la vuelta al colegio supone una alegría para los padres y los niños porque en algunos siguen existiendo deficiencias que suponen un importante quebradero de cabeza para los ayuntamientos y una gran preocupación para los progenitores.

Es el caso de Sorbas donde familias de los escolares del centro público rural Lusor acompañarán a sus hijos el lunes al colegio pero estos no entrarán como medida de protesta por la situación en la que se encuentra el centro educativo.

El colegio, situado en la pedanía de Cariatiz en la que conviven unas 200 personas, cuenta con "deficiencias" como que mantiene techos de uralita, "necesita arreglo" de las chimeneas, algunas clases tienen "avisperos" y los sanitarios "tienen más de 40 años", ha comentado a Europa Press la madre de una de las alumnas de este centro, Yolanda Brioso Velasco. Su hija tiene siete años y es una de las doce personas que estudian en este centro de Infantil y Primaria.

"No tenemos queja alguna del profesorado y nos encanta nuestro colegio rural, pero queremos que lo arreglen", ha insistido la madre y asegura que han dirigido escritos a la Delegación Provincial de Educación en busca de una respuesta que aún no se ha producido.

Los arreglos puntuales de los centros de Infantil y Primaria corresponden a los gobiernos municipales, pero los familiares reclaman, por la situación del colegio, que se realicen "obras mayores" o se "construya" un nuevo colegio para atender a esta población.

Una situación similar es la que viven en Benahadux. Allí, representación de los padres del colegio Padre Manjón y de la plataforma P.A.E.P (Plataforma Andaluza de Educación Pública) se manifestaron hace unos días en la Delegación de Educación para pedir se le concedan las dos líneas al colegio.

Además de las 104 reclamaciones individuales y de presentar denuncia del problema al Defensor del Pueblo Andaluz, tienen pensado llevarlo por la via judicial, ya que "consideramos que superamos el ratio máximo permitido, tanto en Infantil de primer año como en 6º curso de primaria", señalan.

Además denuncian que "en Infantil, se atenta gravemente a la seguridad del centro ya que se incumple con la normativa de seguridad al no tener en cuenta los criterios que exige el Código Técnico de Edificación, donde se establecen las normas técnicas relativas a la seguridad estructural, la salubridad y la seguridad en caso de incendio entre otras, fijando entre otros requisitos, una ocupación de 2 metros cuadrados por persona en aulas infantiles . Por lo que consideramos que no se puede meter a 28 personas en menos de 50 metros".