El Ayuntamiento de la capital, a través de la empresa municipal de la vivienda, Almería XXI, le ha dado una nueva vuelta de tuerca al programa de ayudas al alquiler de viviendas del casco histórico. Unas subvenciones con las que se pretende facilitar un techo a los arrendatarios cubriendo parte de los costes y de contribuir a la revitalización de este barrio y frenar su envejecimiento y despoblación. En la próxima convocatoria, también se beneficiarán los propietarios y arrendadores con bonificaciones de hasta el 50% del Impuesto de Bienes Inmuebles, conocido también como la contribución.

Este programa salió por primera vez a la calle en el año 2018 sin mucho éxito desde la Concejalía de Familia para luego hacerse cargo del mismo Almería XXI. Las bases fueron modificadas obteniendo la respuesta esperada los dos años siguientes, si bien, según ha explicado la consejera delegada y concejal de Urbanismo, Ana Martínez Labella, el programa en 2022 se ha “estancado”. De ahí que se haya optado por reformular las bases y criterios para la concesión de estas ayudas. “Hemos detectado bolsas de viviendas cerradas y queremos que afloren para su alquiler”, razón por la que se han incluido incentivos dirigidos a la propiedad.

Los dueños y arrendadores que se registren en este programa municipal pueden obtener hasta un 50% de bonificación del IBI y hasta un máximo de 500 euros. Si la relación de alquiler no abarca la totalidad del año de arrendamiento requerido en las bases, la bonificación se aplicará de forma proporcional al tiempo en el que la vivienda ha permanecido alquilada, según ha desgranado Martínez Labella, quien someterá el jueves al Consejo de Administración de Almería XXI estos nuevos cambios en las bases reguladoras de la concesión de ayudas.

Otro de los aspectos importantes que van a variar es el ámbito que cubren. Será ampliado, de tal manera que el límite establecido en la plaza de los Derechos Humanos se extiende hasta la calle Restoy en su confluencia con la plaza El Quemadero, y hasta el triángulo conformado por las calles Murcia, Granada y Huérfanas.

Requisitos de los arrendatarios

En cuanto a los requisitos exigidos a los arrendatarios, el límite de edad establecido para poder optar a estas ayudas, que ya fue ampliado años atrás, se mantiene en los 45 años. Tienen que ser titulares de un contrato de arrendamiento vigente en el momento de la solicitud, destinada a vivienda habitual y permanente y encontrarse en una situación de vulnerabilidad o con ingresos limitados (un salario tres veces inferior al IPREM –estos es menos de 25.000 euros al año–). Además, y entre otras exigencias, deben empadronarse –salvo que sean estudiantes de la Universidad de Almería, que fue otro de los cambios introducidos en anteriores convocatorias–, y no tener relación de parentesco alguno con los propietarios o arrendadores.