El balance anual climático que acaba de publicar la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ha clasificado al último año 2022 como el más cálido desde el comienzo de la serie histórica en 1961. Este resumen recoge que la temperatura media de la España peninsular fue de 15,4 grados centígrados, lo que supone 1,7 por encima de la media del periodo de referencia 1981-2010. Ocho de los diez años más calurosos de la serie pertenecen al actual siglo XXI. Esta climatología extremadamente cálida alcanzó valores superiores a los habituales en el conjunto de la geografía española, si bien en la provincia de Almería no se han experimentado anomalías reseñables en cuanto a la subida de temperaturas máximas y mínimas.

Porcentaje de precipitación respecto de la media 1981-2010

En un contexto de incremento permanente de los termómetros en los últimos años, la evolución térmica de 2022 no presenta en la provincia, como sí ocurre en otros puntos de España, alteraciones significativas, si bien se registró una importante desviación en los registros pluviométricos. Mientras que en el conjunto del país se ha cerrado un ejercicio bastante seco, con precipitaciones acumuladas muy inferiores al valor normal, en el sureste peninsular se alcanzaron registros históricos por encima del 100% de la media del periodo de referencia 1981-2010 en la Región de Murcia, Comunitat Valenciana, Albacete, Granada y Almería. Así lo dibuja la Aemet en su mapa de pluviometría en el que contrasta el amarillo y naranja mayoritario en el resto del país -valores inferiores- con el verde claro y oscuro que se extiende principalmente por la provincia y el norte de Granada con un 200% más de los valores normales (mapa de la derecha).

También lo corrobora la Junta con los datos del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la Red Hidrosur, principal indicador de la Cuenca Mediterránea Andaluza en funcionamiento desde 1991, al aparecer en su estadística seis estaciones que han superado todos los registros anteriores. La estadística de la monitorización al cierre del último año hidrológico, comprendido entre el 1 de octubre 2021 y el 30 de septiembre de 2022, puso de manifiesto que en 20 de las 27 estaciones se han acumulado más lluvias que en el ejercicio anterior, 18 estaban por encima de la media histórica (1996-2010) y 6 que han batido el récord de máxima pluviometría duplicando algunas su nivel de precipitaciones.

En algunas localidades se han superado en un 200% los valores medios de precipitaciones

Durante el año hidrológico 2021/2022 se recogieron 414 litros por metro cuadrado en Fiñana superando los valores normales (237) y el mayor registro hasta la fecha que se remontaba al ejercicio hidrológico 2009/10 con 398 litros por metro cuadrado. Ocurre igual en la Rambla de Tabernas con 336 litros por metro cuadrado frente a los 192 de media histórica y anterior techo alcanzado en 2009/10 con 334. Las estaciones del Río Almanzora en Cantoria y Serón también han experimentado su periodo más lluvioso de la historia con 480 y 542 litros por metro cuadrado cuando los valores normales son 272 y 281. El siguiente de los récord del último año hidrológico está en Níjar con 338 litros por metro cuadrado frente a los 195 de media y un anterior máximo de 335 en 2009/10. Y, por último, Sorbas también marca su pluviometría más alta desde que hay registros con 518 litros por metro cuadrado que duplican los 236 de la serie histórica y los 418 del anterior récord que data del año hidrológico 2003/04.

La red Hidrosur y las mediciones de la Aemet permiten concluir que 2022 ha sido un año extremadamente húmedo, un cambio radical de paisaje para una provincia en la que siempre aprieta la sequía. Y lo hace casi a contracorriente porque en el resto del país el último año ha resultado, en su conjunto, muy seco en cuanto a las lluvias, con un valor de precipitación media sobre España peninsular de 536 litros por metro cuadrado, valor que representa el 84% del valor normal en el periodo de referencia 1981-2010. Ha sido el sexto año más seco desde el comienzo de la serie en 1961 y el cuarto del siglo XXI. Después de un inicio de año bastante seco, la primavera disparó la precipitación media en la provincia, principalmente con las lluvias torrenciales de marzo y abril, el verano y otoño se mantuvieron en valores secos y a partir de noviembre volvieron a crecer. El resumen de la Aemet califica como húmedo en gran parte de la provincia y muy húmedo en la mitad suroriental en las que se han llegado a superar en un 300% la media histórica.

Estado de escasez: Levante

A pesar del balance positivo de la pluviometría y de que actualmente no hay ningún punto andaluz en estado de sequía, el último informe de la Demarcación Hidrográfica de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas evidencia que la unidad territorial del Levante almeriense (comprendida entre Albox, Huércal-Overa, Vera y Carboneras) presenta estado grave de escasez de recursos hídricos, al igual que en el pantano de la Viñuela de Málaga, al depender en el caso almeriense de recursos adicionales como los que llegan del Tajo y Negratín. A 23 de enero de 2023, el embalse de Benínar está al 13% de su capacidad con 8,34 hectómetros cúbicos de los casi 36 que tiene de capacidad, un registro levemente inferior al de la semana anterior. La media de hectómetros cúbicos durante 2022 fue de 5,15. En cuanto al embalse de Cuevas, actualmente roza los 26 hectómetros cúbicos que supone el 16,5% de su capacidad frente a los 11,55 que mantuvo embalsados durante el pasado año.