La Asociación de Discapacitados Murgi, entidad miembro de FAAM y con sede en El Ejido, recibió ayer el arropo de administraciones públicas y empresas hortofrutícolas en la presentación de un novedoso proyecto: la agenda agrícola solidaria.

Durante el acto de presentación de esta publicación, el presidente de la asociación Murgi, Francisco Ripoll, insistió ayer en que "la discapacidad no impide hacer muchas cosas" y, por ello, apostaron por la realización de esta agenda "con la que implicarse con el sector agrícola ofreciendo esta agenda como un cuaderno a pie de campo en el que el agricultor pueda anotar todas las cuestiones importantes".

Durante esta primera etapa de la campaña, más de un centenar de agricultores se han interesado por adquirir la agenda agrícola solidaria de la que la asociación ha hecho una primera tirada de 1.000 ejemplares, a los que podrían sumarse las peticiones de otras empresas interesadas. No en vano, la agenda ha contado con el apoyo de la alhóndiga la Unión y, por ello se va a repartir también entre los agricultores de esta empresa. El gerente de la alhóndiga, Jesús Barranco, afirmó ayer que la agenda es "es una herramienta de trabajo que ha sorprendido a todos los agricultores que ya la han visto". En esta misma línea, apostilló que se trata de una agenda "muy intuitiva, fácil de manejar y sobre todo es una herramienta que va a ser muy útil para recopilar los datos de la campaña de cara a prever las características y necesidades de próximas producciones".

Por su parte, el director general de Industrias y Cadenas Agroalimentarias de la Junta de Andalucía, Rafael Peral, se mostró sorprendido por el resultado final de la agenda y deseó que la iniciativa "tenga buen calado entre los agricultores, pues la asociación Murgi ha hecho un magnífico trabajo y la implicación del sector hortofrutícola es una prueba evidente de que las empresas del campo se preocupan por la gente que les rodea".