En menos de un mes se podría dirimir el futuro del Aquarium de Roquetas de Mar. Tras la aprobación en sesión plenaria del dictamen de la Comisión Informativa de Gestión de la Ciudad celebrada el día 6 de junio, y que versa sobre la Propuesta de la Alcaldía-Presidencia de la conveniencia de adquirir un porcentaje de las participaciones sociales de la Sociedad Acuariums de Almería SL o bien tomar otras soluciones alternativas, los técnicos ultiman el estudio final. Éste se presentará, casi con toda probabilidad, en el próximo Pleno ordinario del Ayuntamiento de Roquetas de Mar, según adelanta a Diario de Almería el Consistorio roquetero.

En un primer momento, el equipo de gobierno del Partido Popular propuso adquirir el 75% de las participaciones de la Sociedad Acuariums de Almería SL, algo a lo que se opuso el grupo municipal Izquierda Unida, al considerar que debía tenerse en consideración la pesada deuda que arrastra la empresa, cercana a los 3 millones de euros. El ejecutivo planteó la posibilidad de estudiar diferentes alternativas, y con tal fin dio comienzo el estudio que se ultima en estas semanas.

Posteriormente la Junta Local de Gobierno de Roquetas aprobó solicitar al Grupo de Desarrollo Pesquero de la Consejería de Agricultura y Pesca una subvención de 529.023,77 euros para la instalación en el municipio de un Centro de Interpretación marino que podría ubicarse en la segunda planta del Aquarium, si bien IU solicitó que se emplace en la Casa del Mar, previa rehabilitación. En este caso, se trata de un proyecto independiente, pero que podría ir de forma paralela con vistas a revitalizar las visitas al Aquarium e impulsar así una mayor rentabilidad.

A principios de año el director del Aquarium de Roquetas deMar, Enrique Fernández, anunció el plan de cierre del centro al no poder afrontar el pago delas facturas y los sueldos de los trabajadores. A finales de enero la situación se agravaba aún mñas tras anunciarse que Endesa podría cortar el suministro eléctrico debido a un impago de 9.500 euros, lo que podía poner en peligro a los animales del centro. Gracias a la colaboración de varias entidades se pudo frenar el 'apagón' y, a partir de entonces, el Consistorio planteó una vía de salvación para las instalaciones.