El alcalde de Benahadux, Juan Jiménez, ha mostrado su agradecimiento a la Dirección General de Carreteras, por el arreglo de la N-340 en el tramo comprendido entre Briseis y el polígono San Salvador. Esta zona como consecuencia de las intensas lluvias del pasado invierno, se hundió en varias zonas de forma lenta pero continua, lo que dañó gravemente la principal vía de comunicación con la capital.

Durante los últimos meses, se ha construido una rocalla de piedra para fortalecer e inmovilizar el terreno y la semana pasada se asfaltó de nuevo la carretera, se ha mejorado la evacuación pluvial y se han instalado nuevos quitamiedos. Los trabajos han hecho que sea necesario desviar durante una semana, toda la circulación vial procedente de la Alpujarra por el centro de Benahadux, atravesando la Avenida 28 de Febrero.

Por esta razón, Jiménez ha agradecido a sus vecinos "su adaptación al intenso tráfico que ha padecido el núcleo urbano y El Chuche, con motivo de estas obras".

El objetivo era restablecer la normalidad en una carretera que es de vital importancia para Benahadux, y también para la comarca y la zona de las Alpujarras. Esta semana se cortará durante algunos días la carretera en un único sentido (Almería-Benahadux), para terminar algunos trabajos que aún quedan pendientes.