Los enganches ilegales en el barrio de Pescadería-La Chanca no solo están dejando sin luz a sus vecinos; muchos de ellos pasan días enteros sin electricidad en sus hogares, deben tirar la comida y se rompen aparatos.
Pero eso no es lo peor, los enganches arden debido a la gran acumulación de energía que deben soportar. Se calientan y llegan incluso a explotar como si fueran fuegos artificiales, generando fuego.
Hace escasos días, los vecinos grabaron un fuego de estas características en un bloque, cerca de las ventanas y pudiéndose colar las llamas en las viviendas. La actuación de los bomberos evitó males mayores.
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