Los espacios verdes y zonas ajardinadas del municipio se han convertido por segundo año consecutivo en espacio de aprendizaje para alumnos de jardinería en el marco del convenio suscrito entre el Ayuntamiento de Roquetas de Mar y el Centro de Formación Profesional Campomar.

Ayer mismo los alumnos de segundo curso del Grado Medio Técnico en Jardinería y Floristería se pusieron manos a la obra con tareas de poda y recorte de matorral en Aguadulce. Durante toda la mañana experimentaron en primera persona lo que será su futuro trabajo, supervisados por un profesor y un técnico del Consistorio.

El jefe de estudios de Campomar, Luis Suanzes, explica que el curso tiene una doble vertiente teórico-práctica con el objetivo de que los participantes saquen el máximo provecho de su periodo de aprendizaje y estén listos para afrontar el mundo laboral una vez finalicen sus estudios.

Aunque algunas de las clases prevén trabajos prácticos en las instalaciones del centro educativo, una vez llegan a segundo curso, los alumnos del módulo de Conservación y Mejora de Jardines y Zonas Verdes y los de Implantación de Jardines y Zonas Verdes salen a la calle una vez por semana para realizar trabajos de campo en áreas pertenecientes al Ayuntamiento.

"Sobre todo los llevamos a zonas cercanas al centro, en Aguadulce y El Parador. Trabajan en grupos y cada módulo dedica tres horas a estas tareas una vez por semana", comenta el jede de estudios.

El curso, en el que están inscritos una veintena de alumnos de entre 18 y 35 años, comenzó el pasado mes de septiembre y finaliza con los exámenes de marzo. "Aquellos que superan las pruebas comienzan un periodo de prácticas en empresas de nuestra bolsa de trabajo durante tres meses, de abril a junio".

Buena parte de la promoción que terminó sus estudios el año pasado "está trabajando en empresas o por su cuenta", y también hay quien opta por seguir formándose en el ciclo superior.

Lo que sí está claro es que "cada vez notamos más que la media de edad de los participantes crece. Muchas de las personas que están en paro quieren cualificarse porque saben que así tienen más probabilidad de encontrar trabajo", apunta Suanzes.

Son precisamente los más mayores de clase lo que más se "implican" en el curso, participando, preguntando y colaborando en cada una de las actividades o cuestiones que se plantean. "Vienen a formarse de verdad. Son conscientes de que el título es un aval para su futuro".

Desde Campomar aplauden la colaboración del Ayuntamiento con el curso y se congratulan por el éxito que está teniendo.

Campomar es un centro de Formación Profesional con más de 35 años de experiencia en la formación de jóvenes. Se integra en una red de más de veinte Centros educativos en España que sobrepasa el millar en todo el mundo.

Ofrece cursos de Grado Medio en Técnico en Jardinería y Floristería y Técnico en Producción Agropecuaria, un curso de Grado Superior de Técnico Superior en Gestión y Organización de Empresas Agropecuarias y Formación Para el Empleo (FPE) de Técnico en Software Ofimático para mayores de 45 años y otro para menores de 45 años.

Sus instalaciones se encuentran en calle Juan de Austria, 44 Aguadulce.