Ha sido una tramitación farragosa, pero finalmente –y después de un año–, el Ayuntamiento de la capital ha resuelto el aterrizaje de la hostelería en el Mercado Central, un acicate para el comercio minorista tradicional que se verá reflejado en la instalación de dos bares que ocuparán tres puestos que llevaban tiempo sin ser explotados.

En una reciente Junta de Gobierno Local, el Consistorio, a propuesta del área de Promoción de la Ciudad, ha aprobado la concesión de demanial de los citados tres puestos a favor de las dos propuestas presentadas. Por un lado, y según figura en el acta de la reunión, la de Inmaculada Rubio, responsable de la cafetería de la Plaza, y Rincón de Basi, que se queda con tres de los puestos licitados.

Eran cinco en total, tres de ellos para café-bar y dos, de comidas preparadas, siendo el periodo de concesión de 20 años, tiempo que puede ser prorrogado por cinco más. Cada uno de estos espacios ocupa una superficie máxima de 22,5 m² y se les permite un área para colocar mesas y sillas, así como celebrar actividades de dinamización que inyecten vida al Mercado. Ambos adjudicatarios han superado el precio mínimo de la concesión, que el Ayuntamiento de Almería estableció en 5.697,14 euros de canon inicial.