En plena polémica por el "colapso" del Centro de Atención Inmediata de Menores de Piedras Redondas, donde la Junta de Andalucía traslada a la mayoría de los menores no acompañados llegados en pateras a las costas almerienses, salta ahora la alarma por la falta de personal sanitario en la plantilla del centro, cuya enfermera está de baja y el puesto no ha sido cubierto. El sindicato Comisiones Obreras ha denunciado la situación y ha puesto de manifiesto el "riesgo" que corren los educadores y el resto de miembros de la plantilla de trabajadores del centro, entre ellos el personal de limpieza, cocina y vigilantes, que tienen que hacerse cargo de protocolos sanitarios en casos como por ejemplo enfermedades altamente contagiosas como la sarna. Según ha podido saber Diario de Almería, sólo en los últimos dos meses, que han sido además los de mayor afluencia de menores en el centro que ha llegado incluso a triplicar su capacidad de plazas, se han detectado hasta ocho casos de menores infectados con sarna, ante los cuales se han tenido que activar los correspondientes protocolos de actuación tanto en el propio centro de atención como en el consultorio médico correspondiente.

Se trata de una situación que, teniendo en cuenta las condiciones de "hacinamiento" que se han vivido en las instalaciones, en las que se han tenido que colocar colchones en el suelo para alojar a semejante cantidad de niños, es un problema de salud pública. Como ya ha publicado este periódico, a raíz de la denuncia hecha pública por el sindicato CCOO, en las habitaciones donde antes dormían 2 menores, en los últimos meses se han tenido que alojar hasta cinco. Además, se han tenido que hacer tres turnos de comedor. Y todo teniendo en cuenta que la capacidad del CAI de Piedras Redondas es de 18 plazas y que se ha llegado a atender hasta 43 menores.

La falta de personal sanitario en el Centro de Atención Inmediata de Menores de Piedras Redondas ha provocado que hayan sido los educadores los que se han tenido que hacer cargo de los distintos protocolos sanitarios, es decir, de los menores que ingresan sin enfermedades, de los que llegan con enfermedades no tratadas y de los que llegan con enfermedades que sí están tratadas, clasificados por pulseras de distinto color. Según ha explicado la Delegación de Igualdad de la Junta de Andalucía ante la situación, "se ha establecido el correspondiente protocolo para los menores afectados por la enfermedad y se han dado a los trabajadores todas las pautas de higiene necesarias para el control de la enfermedad". En este sentido, pese a los riesgos de contagio que tiene enfermedades como la sarna, "no hay ninguna sospecha de contagio entre los profesionales del centro", insisten desde Salud.

Tras días de silencio por parte de la Junta de Andalucía ante semejante "caos", desde la Delegación provincial de Igualdad de la Junta de Andalucía han avanzado a este periódico que "ya ha finalizado la baja por incapacidad temporal de la profesional que ocupa la plaza de Enfermería del centro de acogida de menores, que se incorporará próximamente a su puesto de trabajo". Además, insisten en que independientemente de esta baja, los profesionales del centro han contado con el apoyo y el seguimiento del servicio de Prevención de Riesgos Laborales, y los menores afectados con sarna, como cualquier otro paciente, han sido tratados a través del Sistema Sanitario Público.