Almería

Las lluvias de octubre dejan su impronta en toda la provincia

  • La Junta va a acometer obras para arreglar los desperfectos causados

La Junta de Andalucía prevé invertir 556.000 euros, para reparar daños causados en varias carreteras almerienses por las tormentas registradas del 10 al 14 de octubre. La delegada provincial de Obras Públicas, Alejandra María Rueda Cruz, ha solicitado a la Dirección General la declaración de emergencia para estas actuaciones, con plazo de ejecución estimado en tres meses.

Las lluvias intensas, concentradas en breve tiempo y reducido espacio, con fuertes rachas de viento, afectaron a 6 tramos de carreteras autonómicas: Dos entre Tabernas y Olula del Río (A-349), uno en la entrada de Berja desde Adra (A-347), otro de Tabernas a Uleila (A-1100), el de Serón a Gérgal (A-1178) y el de Purchena, en la C-323 antigua. Tras la intervención urgente por equipos de conservación, ahora se proyecta el arreglo a fondo.

En Tabernas, entre los puntos kilométricos (pp.k.) 3 y 6 (de Plataforma Solar a rambla Honda) la A-349 discurre por un terraplén de 1,5 a 3 metros de altura. Quince obras de drenaje transversal, con 1 m. de diámetro, recogen las aguas del falso llano, abancalado en vaguada. Pero el arrastre masivo de tierra llegó a obstruir varios desagües, con inundación de bancales y rotura de caballones, corriendo el torrente junto a la carretera y socavando el talud.

La primera tarea es limpiar los 15 pasos de agua, reconstruir los bancales y taludes, y proteger con escollera sus zonas más vulnerables, así como las boquillas de salida y 20 metros anteriores a las obras de drenaje. De éstas, hay que ampliar las situadas en la zona más baja (junto al acceso a la central solar) añadiendo un tubo del mismo diámetro a la del p.k. 3,1 y dos tubos a la del 3,3.

En la comarca del Mármol, entre los pp.kk. 44'3 y 45'7 (del polígono industrial de Macael al río Almanzora) hay un talud inestable, seguido de un tramo con gran pendiente, donde la cuneta se desbordó. El agua corrió por la calzada de 3 carriles hasta inundar el puente de Olula, socavando el terraplén del estribo, que se rellenará y protegerá con escollera. También se va a reperfilar 700 metros de cuneta dañada y revestirla de hormigón.

En el talud, la socavación de materiales sueltos amenaza la estabilidad de grandes rocas que lo coronan a más de 30 metros. Hay que sujetarlas con red de acero, a cuadros de 4 metros, anclada en los nudos con barras de 3 metros por 25 milímetros de diámetro. El material inestable se cubrirá con 10 centímetros de hormigón proyectado y anclado con bulones de 6 metros en cuadrados de 3 metros. Se refuerza el pie y la cabecera del talud con 800 metros cuadrados de malla triple torsión, anclada con picas de metro.

El desbordamiento hasta el puente se produjo al quedar obstruídas tres obras de drenaje transversal, tanto por los arrastres de tierra como por el lodo vertido a los cauces naturales por explanadas e instalaciones marmolistas, tapando la salida de los desagües. Habrá que rehacerlas a mayor cota mediante perforación horizontal, ya que no hay posible desvío para cortar esa carretera, con más de 10.000 vehículos diarios y alto porcentaje de pesados.

Por otro lado, el acceso a Berja desde Adra (A-347, del p.k. 9 al 10'75) está flanqueado por viejos árboles de gran porte. Son casi 400 plátanos de sombra, con altura superior a 10 metros, que apenas dejan 6 metros de ancho en calzada. El 11 de octubre la fuerza del viento arrancó grandes ramas y otras amenazaban con caer sobre la carretera, obligando a la Policía Local a cortar la circulación de las 6 a las 18 horas. Dado que la época del año es idónea, se realizará una poda intensiva de las copas.

En la zona de Taberas, en la conocida Cuesta Blanca (p.k. 3 al 4 de la C-3325, actual A-1100), que discurre a media ladera, en trinchera y con gran pendiente, ha sufrido socavaciones en las cunetas, quedando descarnados sus taludes y amenazando la estabilidad de la calzada, con sólo 6 metros de ancho. Se plantea reperfilar 700 metros de cunetas (profundizar las aterradas y rellenar las socavadas) para luego revestirlas de hormigón.

Más al norte de la provincia, entre Serón y el collado Ramal (A-1178, pp.kk. 1 a 18) se ha deslizado una serie de taludes en desmonte, aterrando cunetas y, en algunos puntos, ocupando arcenes en los 8 metros de calzada. En zonas protegidas por malla metálica se ha evitado que caiga tierra, pero se ha resentido la protección de triple torsión. Habrá que izarlas de nuevo con grúa, para que se desprenda la tierra, y reparar las roturas. Tras retirar el material desprendido, se hará un reperfilado de las cunetas.

Por úlitmo, hay incidencias en la C-323 (p.k. 51 al 52) que discurre por Purchena, del enlace oeste de Olula a la rambla de la Cuna. Debido a la pendiente, la lluvia bajó por las cunetas a gran velocidad, socavando y descarnando los lados de la calzada, con sólo 6 metros de anchura. La obra consistirá en reperfilar 650 metros de cuneta y revestirla de hormigón.

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