La procesión en honor a San Miguel tuvo una singularidad que apreciaron todos los vecinos que decidieron arropar un año más a su patrón en un recorrido en el que no faltaron los vivas a San Miguel, que significa quién cómo Dios. La nota distintiva de la procesión vino marcada porque el trono con la imagen del patrón fue portada por primera vez a hombros de una veintena de costaleros, que marcaban el paso al ritmo de la música interpretada por la Banda Municipal de Pulpí. Este hecho ha conseguido que la procesión del santo patrón gane en vistosidad. Una procesión que se celebró como cada año el 29 de septiembre, día en el que los pulpileños festejan la onomástica del patrón.

El recorrido daba comienzo pasadas las 12:30 horas cuando el trono tomaba la plaza tras abandonar la parroquia de San Miguel Arcángel a los sones del himno nacional. Tras el trono, la comitiva de fieles, que encabezaba el alcalde Juan Pedro García junto a sus concejales del equipo de Gobierno y la reina y damas de las fiestas 2011.

Antes de que el patrón saliera a la calle se ofició una misa en su honor en la parroquia de San Miguel Arcángel, un inmueble que forma parte del patrimonio de esta localidad. El templo se construyó en 1801 tras solicitar el levantamiento en 1787 con el objeto de poder ejercer en ella todas las funciones del Ministerio Parroquial y administración de los Sacramentos.