La Fiscalía ha interesado penas por un total de 21 años para un hombre acusado de maltratar y agredir sexualmente a su expareja.

La calificación del fiscal señala que el procesado mantuvo una relación sentimental con la víctima entre abril y agosto de 2015. Meses más tarde, el 29 de diciembre de dicho año, la mujer acudió al domicilio en Badajoz del acusado para recoger sus “enseres personales”, después de que éste hubiese intentado convencerla, sin éxito, para retomar la relación.

Fue entonces cuando, presuntamente, el hombre se marchó con “apariencia de tristeza a su dormitorio”, lo que hizo que la víctima acudiese tras él. Cuando se acercó al varón, éste la habría agarrado con fuerza, “guiado por el ánimo de satisfacer su apetito sexual”, para empezar a besarla en contra de su voluntad.

El fiscal insiste en que la mujer intentaba zafarse mientras le decía expresamente al acusado que la dejara, pese a lo cual siguió, supuestamente, besándola. El Ministerio Público mantiene que entonces le quitó la ropa por la fuerza y le chupó los pechos, haciéndole acto seguido tocamientos en sus partes a la mujer, que pudo abandonar el lugar cuando paró al sonar el móvil de ella.

Por estos presuntos hechos, el fiscal pide un total de 20 años de prisión por dos delitos de agresión sexual, y un año de cárcel por un delito de maltrato en el ámbito de la violencia sobre la mujer.