Almería

Un piñón; un sueño

  • Asensio Bike es una nueva tienda pionera en restauración y customización de bicicletas Su propietario, Adrián, de tan solo 24 años, encarna al joven emprendedor con afán de superación

Un sueño no es tan difícil de conseguir con actitud y empeño. Estas actitudes son las que podrían definir perfectamente a Adrián Asensio, un joven roquetero y emprendedor que, desde hace cuatro meses, ha irrumpido con fuerza en un mercado pionero en Almería, pero también, casi a nivel nacional.

Asensio Bike es el primer negocio en el que cualquier romántico de las dos ruedas puede devolverle la vida a su antigua bicicleta. Además, también es posible conseguir aquella que siempre deseaste desde pequeño, pero que nunca llegaste a disfrutar. En estos casos, Adrián Asensio activa su rastreador, para el que cuenta con multitud de contactos a nivel nacional, e intenta conseguir esa reliquia.

Da igual de cuando date, Asensio hará todo lo posible para que ese soñador; esa persona que quiere rememorar su infancia o, que simplemente, su hijo o nieto sea partícipe de ella, tiene la posibilidad de transmitir esa tradición a los suyos.

Sin embargo, las modas también mandan, y el afán por adquirir velocípedos antiguos forma parte de esa cultura 'retro' cada vez más instalada en la sociedad, sobre todo entre los más jóvenes, que han hecho de los objetos antiguos, elementos verdaderamente codiciados.

"Hay muchas personas, cada vez más, que quieren restaurar su antigua bicicleta o, también, adquirir aquella que nunca tuvo en su infancia. Aquí le ayudamos a que ese sueño se convierta en realidad. Cualquier cosa es posible y lo que cualquier cliente tenga en mente, sea lo que sea, bien por una difícil adquisición o a la hora de customizar una bicicleta de una manera y con unos materiales muy específicos, aquí se lo haremos", explica este joven roquetero, residente en Aguadulce.

Estos cuatro meses de andadura no han sido fáciles, algo normal en el sector empresarial en los tiempos que corren, pero Adrián se ha sobrepuesto con trabajo y dedicación a su negocio. "Es verdad que los comienzos no son fáciles, pero me gusta mucho el mundo de la bicicleta y cuento con la mejor ayuda; mis padres. Ellos siempre han sido empresarios. Mi familia siempre ha tenido negocios y yo he aprendido durante toda mi infancia a cómo hay que lidiar con esta realidad. Tengo muy buenos consejos gracias a ellos", explica orgulloso el joven.

Una vez dentro del negocio, situado en la avenida Carlos III, los clientes que acuden por primera vez, ya sea por curiosidad, o porque conocen de la labor que realizan, suelen sorprenderse al ver algunos de los últimos trabajos desarrollados por Adrián. Estos días, se puede observar un biciclo de los años setenta en color verde oliva. Lo más llamativo es que originariamente era una bicicleta de paseo para chica que, ahora, se ha convertido en un velocípedo masculino y de carreras. Una auténtica maravilla a la vista, que fue rescatada de una trituradora para hacerla chatarra y ahora enamora a los más románticos al verle los puños en cuero artesanal o el sillín restaurado con unos prominentes muelles para los baches, tal cual se comercializaba por aquel entonces.

Asensio cuenta con la inestimable colaboración de Mauricio García, un diseñador freelance que asesora en el diseño que el cliente desea pero que no termina de plasmar. Pa eso, este joven artista, asesora para dar ideas y posteriormente plasmarlas sobre el papel y así, poder hacer realidad hasta la petición más extraña, porque todo es posible para estos dos jóvenes.

De esta forma, Adrián Asensio representa el paradigma del joven emprendedor que es capaz de salvar las adversidades y vivir de lo que más le gusta; el mundo de las dos ruedas.

De momento tiene los pies en el suelo y solo piensa en el día a día, donde disfruta y es consciente de que está explotando un auténtico filón comercial donde, los amantes de la bicicleta tienen una oportunidad única, pues "el límite lo ponen tus sueños"; ellos hacen el resto.

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