Al adentrarse en el municipio de Alicún una de las edificaciones arquitectónicas más llamativas es el Alminar que pasivo se encuentra junto a la balsa del pueblo. Pero durante estos meses, este espacio cuenta con un atractivo añadido y lo que sirvió hace siglos como un espacio de aguas termales hoy es el refugio perfecto para afrontar los días de altas temperaturas. El Ayuntamiento a falta de una piscina Municipal, un año más, ha llevado a cabo una de las actuaciones más agradecidas por los habitantes del pueblo. Que no es otra que acondicionar este espacio para que sus vecinos puedan refrescarse mediante un baño. Por ello, a comienzos de julio desde el Ayuntamiento comienzan a preparar este estanque. Durante todo el año la balsa tiene agua que se sirve para el regadío de los diferentes cultivos del municipio. Por este motivo lo vacían en primer lugar para poder limpiarlo y pintarlo seguidamente.

Una vez realizado esto vuelven a llenarla, pero esta vez con agua potable. Para todo ello el Consistorio contrata a 5 personas de la propia localidad para que desempeñen estas labores. Esta actividad le supone al pueblo un coste de 600 euros. Como afirma el alcalde de Alicún, Manuel Jesús Cantón: "Con esto pretendemos desde el Ayuntamiento otorgar un espacio donde nuestros vecinos puedan refrescarse sin la necesidad de trasladarse hasta otro punto de la provincia almeriense para ello". Otra de las características de esta balsa es que se ha convertido en un reclamo turístico, como declara al alcalde: "Lo curioso de esta iniciativa es que son muchas las personas que vienen a visitarnos para poder ver y bañarse en estas aguas". Y es que durante estos meses de verano la población de este pequeño rincón de la Alpujarra se duplica. Son muchas las personas que tienen este pueblo como segunda residencia y viajan hasta aquí, y como afirma el propio Manuel Jesús Canton: "La balsa fue, ha sido y sigue siendo el mayor reclamo turístico de nuestro municipio".

Es normal encontrar en este espacio a ciudadanos de todas las edades, ya que como afirma el edil al Diario de Almería: "Nuestra intención desde el Ayuntamiento es que se beneficien de estas aguas todos los vecinos independientemente de la edad, pero tengo que reconocer que la balsa es un gran reclamo para todos los niños y jóvenes", y añade, "cuando se acerca el calor es muy habitual que los niños me paren por las calles preguntadme que cuándo vamos a limpiar el estanque". Ahora coincidiendo con las fiestas del pueblo que se celebrarán durante el fin de semana, de 26 al 27 de agosto, la balsa volverá a relucir, ya que se volverán a repetir las labores de limpieza.