El equipo de gobierno de Huércal de Almería ya tiene definitivamente aprobada la modificación de la Ordenanza Fiscal del Impuesto sobre Bienes Inmuebles, con la importante reducción del tipo impositivo del 0'65% al 0'55%, en base a la propuesta de Alcaldía del pasado mes de julio.

La medida constituye una promesa del gobierno municipal por cuya consecución lleva meses trabajando, incluso en contra de las directivas establecidas por el gobierno central. Desde el Ayuntamiento se han venido estudiando todas y cada una de las posibles vías para lograr la reducción del IBI, uno de los impuestos más gravosos para los ciudadanos, conscientes de la difícil situación económica que atravesamos, en un intento por hacerla más llevadera a todos los huercalenses, aún a costa de que ello conllevará una importante reducción de los ingresos a las arcas municipales.

No obstante, de entre todas las posibles medidas estudiadas, hasta el momento ninguna había podido considerarse viable, bien por derivar en el efecto contrario al perseguido, como es el caso de la solicitada, y posteriormente renunciada, actualización del valor catastral, que según los cálculos de la Dirección General del Catastro habría supuesto un incremento; bien por contar con informes contrarios de intervención y/o secretaría por no ajustarse a derecho, etc.

Finalmente, y como consecuencia de que "para 2014 no hay prohibición a día de hoy", la propuesta de Alcaldía sobre la modificación de la Ordenanza, estableciendo la reducción del tipo impositivo del 065% al 0'55%, constituye ya un hecho que se llevará a cabo para el próximo ejercicio 2014, siempre y cuando las medidas del gobierno central no lo impidan, explica el alcalde Juan López de las Heras.

Esta reducción del IBI para todos los huercalenses supondrá una pérdida de ingresos para la economía municipal de entre los 600.000 y el millón de euros anuales, lo que supondrá "afinar aún más la gestión de los recursos de los que dispone el municipio".

Fuentes municipales explican que la reducción de este impuesto se hará de forma paulatina y repercutirá en el recibo que pagan los vecinos que les supondrá de primeras un 18% de rebaja hasta el 23% final.