Adiós a los cielos despejados: las lluvias llegan a Almería con la borrasca Claudia

La provincia de Almería asiste a un cambio meteorológico de gran calado con la llegada de la borrasca Claudia después de un periodo prolongado que mantenía los cielos inusualmente despejados y las temperaturas elevadas para la época. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) confirma la llegada de las lluvias a partir del viernes 14 de noviembre, lo que supone un giro radical en el panorama climático de la región. Esta inestabilidad se presenta con un aumento progresivo de la nubosidad, chubascos intermitentes y un descenso palpable en los termómetros, instalando de lleno el ambiente otoñal.

El impacto más notable se refleja en las temperaturas, que experimentan una bajada de entre tres y cinco grados a lo largo del fin de semana, aunque los valores continúan siendo suaves. Este descenso térmico es uno de los elementos clave que marcan el paso de un clima casi veraniego a condiciones más típicas del otoño. La previsión general para la capital almeriense y las principales comarcas apunta a un clima más fresco y húmedo.

El jueves mantiene aún la calma antes de la tormenta

El día de mañana, jueves, se presenta como una jornada de transición, donde la estabilidad aún prevalece. Los intervalos de nubes medias y altas junto a la presencia de polvo sahariano, conocido como calima, caracterizan el ambiente, especialmente en el litoral. En la capital, las máximas alcanzan los 27 °C, mientras que las mínimas se sitúan en 17 °C. Por su parte, la comarca del Levante, con municipios como Huércal-Overa, registra oscilaciones entre los 25 °C de máxima y los 12 °C de mínima.

El viento sopla flojo de poniente, ganando algo de intensidad en la línea de la costa, pero no se esperan lluvias significativas en esta jornada. Este día constituye el preludio del cambio que se avecina con la entrada del fin de semana, una señal clara de la modificación del patrón atmosférico. La tranquilidad previa al frente de inestabilidad domina la provincia durante estas horas.

El viernes trae las primeras gotas y el descenso térmico

El verdadero cambio de tiempo comienza a notarse a partir del viernes, con la llegada de precipitaciones débiles o moderadas. Estas lluvias se concentran inicialmente en el Poniente almeriense, que actúa como la puerta de entrada de la inestabilidad a la provincia. La probabilidad de lluvia asciende de manera considerable, tocando el 70 % en Adra y El Ejido, y alcanzando un 65 % en la capital almeriense, mientras que el interior se mantiene con valores de entre 50-60 %.

Las temperaturas muestran ya una ligera tendencia a la baja: la máxima en Almería alcanza los 24 °C, un valor idéntico al que se registra en Huércal-Overa, con unas mínimas que oscilan en el rango de los 11 °C a los 17 °C. Este descenso inicialanticipa la evolución más fría que se consolida durante el resto del fin de semana, marcando el inicio de un periodo más fresco.

Sábado de inestabilidad en el Poniente y el interior

La jornada del sábado 15 de noviembre mantiene la tónica de inestabilidad, con chubascos ocasionales y la posibilidad de alguna tormenta. Estas precipitaciones son más frecuentes en el Poniente y en las zonas del interior de la provincia, que reciben el mayor impacto del temporal. En contraste, la comarca del Levante, donde se insertan Vera, Garrucha y Mojácar, queda parcialmente al margen, con lluvias más débiles.

Las temperaturas se estabilizan sin grandes variaciones respecto al viernes: la máxima alcanza los 23 °C en Almería capital y los 24 °C en Huércal-Overa. Las mínimas se mantienen entre los 10 °C y los 17 °C. Los vientos de poniente continúan moderados, generando rachas más intensas en el litoral, un factor que contribuye a la sensación de ambiente fresco en la costa.

El domingo, lluvias generalizadas en toda la provincia

El domingo 16 se perfila como el día de mayor inestabilidad meteorológica, con cielos cubiertos y chubascos que abarcan prácticamente la totalidad de la provincia. La AEMET pronostica un 80 % de probabilidad de precipitación en el Levante y la zona norte, mientras que la capital y el Poniente mantienen un riesgo en torno al 70 %. Estas lluvias vienen acompañadas de un viento moderado de poniente.

Las temperaturas registran su valor mínimo de este episodio de inestabilidad: bajan hasta los 22 °C en Almería y los 23 °C en Huércal-Overa. Las mínimas se sitúan en 15 °C y 11 °C respectivamente. Este panorama cierra el fin de semana con un ambiente plenamente otoñal, alejando definitivamente la calidez de las semanas previas.