Tal y como había anticipado la Alcaldesa de Mojácar en el Pleno celebrado el pasado día 25 de julio, el edificio de Usos Múltiples era ayer el centro de reunión ciudadana para informar de la modificación de los valores catastrales de todo el municipio mojaquero con el objeto de adecuar los altos valores catastrales vigentes a la situación actual del mercado inmobiliario, concordar las características físicas y jurídicas de los inmuebles con la realidad existente y hacer más justo el reparto de la carga tributaria del IBI. La reunión tenía, además, la finalidad de explicar el procedimiento a seguir para conocer el valor catastral de la vivienda y en su caso efectuar las reclamaciones correspondientes. Responder a cuestiones tales como ¿qué es una nueva valoración colectiva catastral? y ¿cómo se notifica al ciudadano el nuevo valor catastral? fue, por tanto, el principal contenido de la reunión, junto a las preguntas que los asistentes quisieron formular al término de la exposición.

Tras un preámbulo histórico acerca de la situación catastral en el año 2004 y hasta el año 2010, Rosa María Cano situó las condiciones para solicitar a la Dirección General del Catastro la revisión de valores. "Para ello", explicaba Cano, "se creó una Concejalía específica de Catastro y a la vez pusimos en funcionamiento una oficina de Catastro porque era nuestra intención que en esta legislatura actualizar el valor catastral". A principios del pasado año 2012, se aprobó efectuar la revisión catastral a la baja.

Tracasa, empresa dedicada a proporcionar servicios cartográficos y catastrales, así como al desarrollo e implementación de sistemas, ha sido la compañía encargada de desarrollar la cartografía del municipio mojaquero, con la valoración completa. José Ferrari, en representación de Tracasa, explicaba que "la valoración colectiva es determinar un nuevo valor catastral y el Ayuntamiento de Mojácar ha pretendido que se llegase más a un valor coordinado con el mercado actual que ha tenido una bajada considerable debido a la crisis inmobiliaria. En este procedimiento se valora la totalidad de los bienes inmuebles urbanos del municipio y aquellas construcciones que están en suelo rústico y que cuentan con construcción". Detalló Ferrari las fases del procedimiento que comienza "con la toma de datos en campo comprobando que los datos tanto físicos como económicos, de uso, y jurídicos. En segundo lugar, en un planeamiento urbanístico, en un estudio de mercado para hacer que los valores que se vayan a proponer en la ponencia que realiza el Ministerio de Hacienda, sean valores que estén acordes con el propio mercado inmobiliario de Mojácar, y, por último, aplicar las normas técnicas que son las que deciden cuál va a ser el valor individualizado de cada bien inmueble". Tanto José Ferrari, como previamente la Alcaldesa de Mojácar, pormenorizaron en la información acerca de las distintas posibilidades de notificación catastral y los plazos para efectuar las correspondientes reclamaciones o correcciones en caso necesario.