La consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, habla sobre la polémica suscitada en el sector pesquero a raíz del rechazo a la prórroga del acuerdo marroquí. 

-¿Qué supone el reciente rechazo de la prórroga del acuerdo pesquero entre la Unión Europea y Marruecos?

-Ha sido un duro golpe que, desde luego, nadie esperaba. Este Acuerdo, vigente desde marzo de 2007, y que expiró en febrero de 2011, contaba con una prórroga hasta febrero de 2012 que permitía a la flota comunitaria seguir faenando en aguas marroquíes. La decisión de romper esta prórroga ha afectado, muy especialmente, a la flota pesquera de Barbate, Conil y Algeciras, donde unas 40 embarcaciones tienen puerto base, y al Golfo de Cádiz en general; no sólo por la paralización de las lonjas, sino por las cantidades que se dejan de percibir en estas zonas por las actividades relacionadas con flota cerquera y palangre del cerco del puerto de Barbate. En el caso de Barbate, y según los datos aportados por la Cofradía de Pescadores del Municipio, las pérdidas ocasionadas por este rechazo entre noviembre y diciembre superan los 44.000 euros, y en el caso de Conil, los 10.000. Estos datos, aportados por el sector, se refieren sólo a las actividades relacionadas con la actividad, es decir, mantenimiento de oficinas, fábrica de hielo y tarifas de las lonjas. Otro dato relevante que refleja las pérdidas que ocasiona este rechazo son los 2,2 millones de euros entre noviembre y diciembre en concepto de licencias sólo en Barbate. 

-¿Por qué ha sorprendido tanto?

-En primer lugar, porque llega con once meses de retraso. Desde febrero de 2011 ya se estaba materializando esta prórroga y solo faltaban dos meses para que finalizase. De hecho,  los pescadores ya habían pagado la licencia correspondiente para poder faenar en Marruecos hasta su finalización, en febrero de 2012. Por otro lado, se ha producido algo inédito hasta ahora, ya que es la primera vez que el Parlamento Europeo entra en codecisión con la Comisión. Esperábamos que el Parlamento Europeo fuera consciente de la importancia de este acuerdo y de lo mucho que beneficia al sector pesquero. Por ello, desde Andalucía pedimos a los europarlamentarios españoles que se sensibilicen y apuesten por la pesca de España y de Andalucía en un momento difícil como éste.  A todo ello se suma la injusta decisión de la comisaria europea, que ordenó que todas las flotas que faenaban en aguas marroquíes abandonaran la actividad de forma inmediata. Una decisión precipitada que ha supuesto un gran perjuicio para los pescadores andaluces.

-¿Qué actuaciones está desarrollando el Gobierno andaluz para reparar daños y ayudar al sector?

-A los pocos días de conocerse la noticia mantuvimos una reunión con el sector en Barbate para analizar la situación, y, posteriormente, con el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para pedirle que comiencen de inmediato las negociaciones de un nuevo acuerdo pesquero con Marruecos. Durante el encuentro, le insistimos en la necesidad de que se establezcan una serie de indemnizaciones económicas destinadas a la flota pesquera paralizada desde el 14 de diciembre, fecha en la que la Comisión dio la orden de que regresaran inmediatamente los barcos que faenaban en aguas de Marruecos. Hay que luchar para que estas compensaciones cubran todo el tiempo que las embarcaciones permanezcan amarradas a puerto. Además, durante el encuentro con el ministro, le entregamos un informe que refleja la repercusión beneficiosa para la flota pesquera andaluza del acuerdo entre la Unión Europea y Marruecos; un informe que entregamos a la comisaria Damanaki en la última reunión que mantuvimos con ella el pasado 22 de noviembre. 

-Habla de la necesidad de un nuevo acuerdo. ¿Qué beneficios aportaba al sector el anterior?

-En el caso de Andalucía, unas 40 embarcaciones con puerto base en Barbate, Conil y Algeciras se han visto beneficiadas por este acuerdo. Los buques generan un empleo directo de unos 500 puestos de trabajo como tripulantes y alrededor de 200 puestos indirectos en tierra. La flota ha facturado, a partir de febrero de 2007, un 68,9% más que el quinquenio anterior y ha comercializado algo más de 52,39 millones de euros. Estos y otros datos de relevancia aparecen reflejados en el Informe sobre la repercusión del acuerdo de pesca entre la Unión Europea y Marruecos para la flota andaluza elaborado por la Consejería de Agricultura y Pesa y entregado al Ministerio que, sin duda, servirá de línea argumental para defender un nuevo acuerdo con Marruecos ante Bruselas. 

-¿Qué datos puede destacar de este informe?

-El documento analiza la flota adscrita al Acuerdo en dos periodos, el primero de ellos, que abarca octubre de 2002 a marzo de 2007, cuando no había acuerdo; y un segundo periodo, entre abril de 2007 y septiembre de 2011, con el acuerdo ya vigente. De este estudio se desprenden datos muy significativos. Si comparamos la producción de los buques adscritos al acuerdo con el Reino de Marruecos durante los 54 meses anteriores y posteriores a la firma del acuerdo, se observa que las capturas se incrementan en 7.531,89 toneladas, mientras que sus ingresos lo hacen en 21,37 millones de euros. Estas cifras suponen un aumento del 45,3% para las capturas y del 68% para los ingresos. Es sólo un ejemplo de los beneficios que aporta este acuerdo a la flota andaluza y la necesidad de trabajar para lograr la firma de uno nuevo. 

-¿Cómo se está viendo afectado el empleo de la población de esta zona andaluza?

-En la actualidad, la flota de cerco andaluza, dirigida fundamentalmente a la captura de boquerón y sardina, y artes menores del Golfo de Cádiz, modalidad que abarca al palangre, genera un cómputo total de 2.233 empleo directos, de los cuales 500 trabajadores están asociados a los buques con licencia para faenar en aguas del Reino de Marruecos. En cuanto a los empleos indirectos, por cada dos empleos en la mar se crea un empleo en tierra en la localidad de Barbate; lo que pone de manifiesto que la actividad vinculada al caladero marroquí añade 200 puestos de trabajo secundarios vinculados con la industria, el comercio y la hostelería. Además, tal y como se refleja en el informe al que he hecho referencia, la continuidad de este acuerdo es crucial para fortalecer la creación de puestos de trabajo más estables y, al mismo tiempo, ha permitido que los ingresos de los tripulantes se dupliquen durante la vigencia del mismo.