Cuatro personas han fallecido y otras 21 han desaparecido en el naufragio de una patera ocurrido en aguas de Cádiz, han informado a Efe fuentes de Salvamento Marítimo, que ha logrado rescatar con vida a tres de los inmigrantes que viajaban en la embarcación.

El naufragio fue detectado minutos antes de las 21:00 del jueves cuando un buque alertó al Centro de Salvamento Marítimo de Tarifa de que había avistado una embarcación de madera semihundida a 37 millas al oeste del cabo de Trafalgar, en una noche con mala mar.

El helicóptero Helimer 202, con base en Jerez, se desplegó de inmediato en la zona y recuperó de la embarcación a dos varones con vida y el cadáver de un hombre, poco antes de que la patera se hundiera definitivamente.

La embarcación Salvamar Enif, también desplazada a la zona, rescató del agua a una mujer aún con vida y que, tras ser izada hasta el helicóptero, fue conducida al hospital de Jerez, junto con los otros dos varones rescatados y el cuerpo recuperado.

Otra de las embarcaciones de Salvamento Marítimo, la Salvamar Emid, recuperó después del mar otros tres cadáveres. Los tres cuerpos han sido trasladados a Barbate, adonde han llegado esta mañana para ser trasladados al instituto anatómico forense, donde se iniciarán las diligencias para su identificación.

Según los testimonios de los supervivientes, en la patera viajaban en total 28 inmigrantes, con lo que se estima que 21 de ellos están desaparecidos en el agua.

Por ello, Salvamento Marítimo mantiene en la zona un operativo de búsqueda en que participa su helicóptero Helimer 202 y el buque Sar Mastelero, que cuenta con el apoyo de otro helicóptero de la Guardia Civil.

Además Salvamento Marítimo ha lanzado avisos a los buques que transitan por la zona para alertarles de la situación. Los tres supervivientes se encuentran en buen estado de salud, según fuentes sanitarias.

Uno de los hombres ha sido ya dado de alta del hospital de Jerez. El segundo obtendrá el alta hospitalaria esta misma tarde previsiblemente, mientras que la mujer está pendiente del resultado de unas pruebas, pero se encuentra en aparente buen estado de salud.