El último informe de la Federación de Organizaciones de Mayores de Andalucía (FOAM) sobre las residencias en el conjunto de la región desvela que Sevilla figura entre las provincias españolas y andaluzas con menos plazas de residencias para mayores de las que aconseja la Organización Mundial de la Salud (OMS). La ratio de Sevilla se sitúa en 2,6 plazas, muy por debajo de las 5 plazas por cada 100 mayores de 65 años que aconseja la organización internacional.

La federación pide acabar con el modelo de residencias masificadas y tipo cuartel por otras más humanizadas donde los mayores conserven su intimidad y cierta autonomía para organizar su ritmo de vida y sus actividades

El informe se basa en los datos de Envejecimiento en Red, el portal sobre envejecimiento y personas mayores que gestionan la Fundación General CSIC y el Instituto de Economía, Geografía y Demografía (IEGD) del CSIC.

En la misma situación que Sevilla se encuentran Málaga y Cádiz, que ocupan el furgón de cola de la comunidad andaluza y del resto del Estado, al contrario que Almería (ratio de 41,86) y Jaén (ratio de 3,9) que se acercan bastante a la recomendación de la OMS.

Así pues hay un déficit de 29.356 plazas de residencia para mayores en Andalucía para completar la ratio aconsejada por la Organización Mundial de la Salud, Teóricamente debería haber 71.941 plazas para los 1,4 millones de personas mayores de 65 años que viven en la comunidad, pero solo existen en la actualidad 42.585 plazas, con lo que la ratio andaluza se sitúa en 3 plazas por cada 100 personas mayores. Estos datos están 2 puntos por debajo de lo que aconseja la OMS y 1,1 punto por debajo del resto del Estado.

La Federación de Mayores reclama la inclusión de la especialidad de geriatría en la cartera de servicios del Servicio Andaluz de Salud

El dominio de las residencias en manos privadas

Otro detalle interesante del informe de las residencias señala la paulatina reducción de las plazas públicas de residencias en favor del dominio casi absoluto de las empresas privadas que gestionan estos servicios sociales esenciales.

En Sevilla, las residencias públicas representan únicamente un 14,81%, frente a un 85,19% de privadas. El mayor porcentaje de privadas lo tiene Málaga (86,92%), seguido de Huelva (86,49%) y en tercer lugar Sevilla (85,19%). Las tres provincias superan la media andaluza de un 76,82% de residencias privadas.

En Sevilla, las residencias públicas representan únicamente un 14,81%, frente a un 85,19% de privadas

La menor proporción de privadas se da en Almería (58,14%), que también cuenta con la mayor proporción de públicas de Andalucía (41,86%), frente a una media general del 23,18% de centros públicos, según detalla el informe.

Esta ha sido la evolución de las plazas públicas y privadas. En el período de los años 2006 a 2019, el número de plazas privadas se ha visto incrementado del 70,80% al 77,69%, es decir, 6,11 puntos, sobre su participación anterior. Todo lo contrario ha ocurrido con las plazas públicas, que han pasado del 29,20 al 22,31%, lo que ha supuesto un descenso de 6,89 puntos, o lo que es lo mismo: una pérdida del 30,88 % de las plazas.

Dentro de las públicas hay una significativa cantidad de ellas gestionada por ayuntamientos que la tienen a su vez concedidas a privados.

De las 161 públicas de Andalucía, un 43,48% de ellas han pasado a ser gestionadas y explotadas mercantilmente por empresas del sector privado, algunas de ellas pertenecientes a grandes grupos multinacionales cuya financiación procede de fondos de inversión tales como Domusvi (perteneciente al fondo Intermediate Capital Group y SRS), Vitalia Home (CVC Capital Parners), de ámbito nacional como CLECE de Florentino Pérez o fundaciones como Geron.

En la Comunidad autónoma de Andalucía, el número de plazas concertadas para residencias en 2020 asciende a 18.624, de las cuales 14.390 (77,27%) tienen como destino centros privados y 4.234 (22,73%) para centros públicos.

El gasto de la administración en concierto social de centros de atención a mayores supera al año los 286 millones de euros.

El ruego de acabar con las residencias "masificadas"

La Federación de Mayores (FOAM) reclama en su informe una gestión más humanizada de las residencias, donde se acabe con "la masificación" de residentes, donde los empleados no dan abasto para atender a un centenar de mayores, y se ponga fin a "las rutinas tipo cuartel" evitando el aislamiento con el resto de la sociedad.

"Este cambio de modelo sería posible, como se hace en otros países, con equipamientos tipo Hogar o unidades de convivencia pequeños, de 10 o 15 personas integradas en un núcleo más grande con equipamientos comunes"

La FOAM recalca que este cambio de modelo sería posible, en línea con las experiencias que se están llevando a cabo en otros países, con equipamientos tipo Hogar o unidades de convivencia pequeños, de 10 o 15 personas, con habitaciones o espacios donde las personas conserven su intimidad, y con cierta autonomía para organizar su ritmo de vida y sus actividades dentro de la residencia o en el exterior; unidasa un núcleo más grande que las integra y contiene equipamientos comunes, zonas al aire libre y les proporciona los cuidados y el apoyo profesional necesario.

En España son ya una realidad modelos basados en el cohousing, en cooperativas. El housing es la opción de recibir cuidados viviendo en su casa o, en el caso de que esto no sea posible, que los cuidados se asemejen lo más posibles al concepto de hogar.

"Un modelo cuyo eje fundamental son las personas usuarias en la vida cotidiana y donde aspectos como sus derechos, preferencias y deseos, adquieren un papel primordial"

La organización asegura que es necesario un cambio liderado por las administraciones, para que las residencias proporcionen "una atención integral de la persona, teniendo en cuenta que es diversa, y cada una tiene sus preferencias, gustos, achaques. Un modelo donde cada persona mantenga su autonomía y el control sobre su propia vida, con posibilidad de desarrollar las actividades que les gusten y en contacto y comunicación con el exterior, integradas en su barrio o su entorno".

Se trata del Modelo de Atención Centrada en la Persona (ACP) que conlleva un cambio con respecto al modelo actual mayoritario de residencias. "Vamos a pasar de un modelo cuya atención está centrada en las necesidades y características de la persona, a otro cuyo eje fundamental son las personas usuarias en la vida cotidiana y donde aspectos como sus derechos, preferencias y deseos, adquieren un papel primordial".

"El SAS debe ofrecer la especialidad de geriatría"

Otra de las reclamaciones de la Federación de Mayores es la inclusión de  la especialidad de geriatría en la cartera de servicios del Servicio Andaluz de Salud, ya que actualmente no existe. "El SAS debe ofertar plazas en la especialidad de geriatría para el año 2021 ya que según la orden SCB/925/2019,de 30 de agosto, Andalucía no ha ofertado plazas en esta especialidad para el año 2020", lamenta la federación.

La situación de Andalucía, donde no existe ni un solo especialista en geriatría en el sistema público de salud, contrasta con la que se da en otras comunidades del país, donde se está creando un despliegue amplio en la especialidad de geriatría en autonomías como Cataluña, Madrid, Castilla la Mancha, Galicia y Catilla y León.

Para obtener el informe nacional sobre las residencias realizado por Envejecer en Red pulse aquí.