Andalucía colocará en el Congreso y en el Senado más escaños del PP que del PSOE. Y con holgura. Así lo indican los datos del Barómetro Joly que, en el caso de esta edición de otoño, incluye una prospección sobre la intención de voto de las elecciones generales del próximo 20 de noviembre. De este modo,  el PP ganaría por vez primera unos comicios nacionales en la comunidad a la que siempre se le ha supuesto ser el granero de votos socialistas, un término que ya se tambaleó en las locales del pasado 22 de mayo. En esa ocasión, el PP obtuvo  7,2 puntos más que el PSOE en el total de la comunidad.

De cara a las elecciones generales, el PP obtendría el 48,2% de los votos andaluces, mientras el PSOE se quedaría en el 36,2%, 12 puntos de diferencia. Es decir, que los populares seguirían abriendo una grieta que comenzó con las elecciones en los ayuntamientos.

El peso de Andalucía es las elecciones al Congreso es fundamental para la mayoría absoluta por la que lucha Mariano Rajoy. Hay que considerar que la comunidad aportará 60 diputados de los 350 de la Cámara de la Carrera de San Jerónimo, y en la actualidad los socialistas andaluces cuentan con 36 escaños y los populares con 25 (para entender la suma, hay que descontar un diputado que ha perdido la circunscripción de Cádiz). Según los datos del Barómetro Joly, el  balance del reparto de escaños se podría acercar a la contraria, aunque este sondeo no adjudica diputados por provincias. El PSOE obtuvo en 2008 un total de 13,7 puntos de diferencia sobre el PP, que se tradujeron en esa relación de 36 a 25. Ahora, la diferencia es de 12 puntos, pero hay que considerar un factor que también aparece como novedad en los datos del sondeo: la subida de Izquierda Unida.

IU se quedó sin representación parlamentaria en 2008, al alcanzar sólo el 5,1% de los votos en Andalucía; ahora, según el Barómetro, estaría en los 7,3%, lo que pudiera darle algún escaños. Los dirigentes de la formación de izquierdas están muy centrados en Cádiz, Sevilla y Málaga, donde consideran que hay opciones de vuelta al Congreso.

Pero el dato especialmente significativo es que los socialistas están algo mejor colocados frente a estas elecciones generales que respecto a las autonómicas. Si el PP les saca, según el Barómetro, 14,6 puntos  en las andaluzas de primavera, con Griñán de cabeza de cartel, en las generales, con Rubalcaba, la diferencia baja en dos puntos. Esto se puede deber a varios factores: la acumulación de 30 años de mandatos ininterrumpidos de los socialistas en Andalucía, la mayor pegada de la crisis en la comunidad o el propio método de elaboración el sondeo, en el que al encuestado se le pregunta básicamente por la situación de la comunidad autónoma. El mejor resultado que Rubalcaba sacaría respecto a Griñán se deben casi en su totalidad a los votantes socialistas.