Rafa Nadal, ganador de 19 torneos de Grand Slam y de 84 de la ATP, doble oro olímpico -individual, en los Juegos de Pekín 2008; y de dobles en los de Rio 2016, Brasil- es, posiblemente, el mejor deportista español de todos los tiempos.

Ante sí, el balear tiene el reto de llegar a una nueva cita olímpica y para ello, es necesario medir cada uno de los esfuerzos. "Queda mucha temporada por delante. Y es una temporada exigente para mí, porque entre 2019 y 2020 he tenido muy poquito parón. Por eso, tengo que medir muy bien los esfuerzos, medir bien el calendario y las decisiones que vaya tomando", explicó el tenista durante el acto de apertura de la Rafa Nadal Academy en Kuwait, la primera que abre en el extranjero. "Los Juegos Olímpicos siempre son una cita que está marcada. Es el evento deportivo más importante del mundo; con lo cual espero estar ahí", añadió.

Cuestionado sobre sus planes de competición, Nadal no descarta competir tanto en individual como en dobles. "No me lo he planteado aún. Me faltan meses. Pero los Juegos Olímpicos siempre están para hacer esfuerzos, para dar el máximo. Y ojalá pudiera estar en todos los lados. Otra cosa es que realmente pueda estar. No lo sé. Hay que ver también cómo llega uno físicamente. Pero voy a estar en el máximo de las cosas que pueda estar. Y veremos qué sucede", explicó.

"Los Juegos son una competición completamente diferente. Evidentemente, es la más difícil de ganar en nuestro deporte, sin ninguna duda. Porque, al final, tienes muy pocas oportunidades de conseguir medallas en nuestro deporte. Grand Slams hay cuatro cada año; Masters 1000 hay nueve. Pero Juegos Olímpicos hay cada cuatro años, sólo. He tenido la suerte de que en las dos ocasiones que he competido conseguí medalla", incidió el balear. "Y para mí, evidentemente, haber sido abanderado en Río fue un momento muy emocionante. Más cuando lo tenía que haber sido en Londres, donde, por esa lesión, no pude serlo. Cuando te ocurren cosas de ésas, ser abanderado es algo que te queda; y es algo que hace mucha ilusión poder vivir", concretó Nadal.

Cuestionado por la victoria de Djokovic en Australia, que permitió que el serbio le arrebatara a Nadal el número 1 del ranking ATP, el balear fue sincero cuando reconoció "que hubiera preferido que ganara Thiem". "Uno no tiene que ser hipócrita, ¿no? A mí personalmente me hubiera venido mejor que ganara Thiem. Pero, para ser sincero, he dormido exactamente igual de bien los dos últimos días: en ese aspecto da igual si hubiera ganado Dominik o si ha ganado Novak. Es parte de nuestro deporte. A Novak este torneo se le da especialmente bien. Y ahora mismo es el mejor jugador del mundo. Así lo dicen los números. Y lo único que se puede hacer es felicitarle por otro gran éxito", relató.