El Valencia se suma a la lista de equipos que, como el Real Betis, siguen los pasos de Darwin Núñez al objeto de acometer la contratación del ariete uruguayo en el mercado de este verano. La irrupción del charrúa, que ya acumula una docena de goles en la categoría de plata tras su doblete ante el Deportivo, unida a su condición de internacional, empieza a llamar poderosamente la atención de equipos con aspiraciones europeas en Primera División, que se posicionan para optar a su fichaje. 

Según avanza el diario valenciano Superdeporte, el conjunto ché, que hace unos meses incorporaba a su secretaría técnica a Miguel Ángel Corona, exdirector deportivo rojiblanco, se encuentra realizando un seguimiento pormenorizado al de Artigas, con informes exhaustivos, al objeto de incorporarlo a su plantel a partir de junio, donde coincidiría con su compatriota Maxi Gómez, con la intención de que puedan complementarse al poseer cualidades diferentes (Maxi es más posicional mientras Darwin ataca mejor los espacios).

Parece difícil que el Almería deje salir a Darwin por menos de 12 millones y podría empezar pidiendo alrededor de 15 por su venta

En la información publicada por el diario deportivo valenciano puede leerse que Darwin Núñez está en la agenda del conjunto dirigido por Albert Celades. El uruguayo es un nombre subrayado para César Sánchez y Corona, que están al tanto de su progresión desde su llegada al Almería, el pasado verano. Turki Al-Sheikh invirtió ocho millones de euros para traerlo desde Peñarol, una institución histórica, donde estaba marcado entre los futbolistas jóvenes con más proyección de Sudamérica. El movimiento, uno de los más importantes de la historia del club y de la categoría, fue posterior a la salida de Corona. En estos meses no ha dejado lugar a las dudas.

En el seno de la UD Almería confían que, caso de jugar en Primera el próximo curso, Darwin lo haga con la elástica rojiblanca, síntoma de que se habría conseguido el ansiado ascenso. De lo contrario asumen que será casi imposible retenerlo debido al cartel que tiene (Óscar Tabárez no se olvida de él en las convocatorias de Uruguay) y en tal caso intentarán sacarle el mayor rendimiento posible al negocio.

Por su contratación, en función de las distintas cláusulas pactadas con Peñarol, los indálicos acabarán pagando entre 6 y 8 millones de euros, por lo que parece difícil que lo dejen marchar por menos de 12 millones, aunque el precio de partida podría rondar los 15 millones. Una apuesta de futuro que podría salirle bien a la nueva propiedad en el aspecto económico, no tanto la del inglés Arvin Appiah (8'8 millones) cuyo rendimiento deportivo está dejando bastante que desear hasta la fehca.