Independientemente de lo que ocurra con la temporada 2019-2020, hoy por hoy en el aire debido a la crisis destada por el coronavirus, lo cierto es que antes de que se suspendieran las dos próximas jornadas y se declarase el estado de alerta, la UD Almería ya había dado el primer paso en la configuración del plantel del próximo curso con la renovación de Sergio Aguza hasta junio de 2023, la primera acometida por la nueva propiedad encabezada por Turki al-Sheik.

Lo lógico es que por rendimiento deportivo el siguiente sea el extremo jiennese José Corpas, uno de los jugadores más en forma del vestuario y que cumple contrato el próximo mes de junio, si bien el propio jugador hace unas semanas prefería no pronunciarse al respecto.

Otro jugador de los considerados veteranos, César de la Hoz, sí que insinuaba el pasado miércoles con motivo de una comparecencia de prensa que estaba muy cerca de poder renovar otro año más debido a una cláusula por partidos disputados. Suma 61 y podría estar alrededor de 65, pero la incertidumbre se cierne ahora sobre su hipotética continuidad dado que ni tan siquiera se sabe cuándo podrá reanudarse la competición.

Echando un vistazo al plantel indálico, una docena de jugadores tendrán contrato en vigor más allá del próximo mes de junio. Se trata del meta Fernando (2021), Iván Martos (2022), José Romera (2021), Jonathan Silva (2024), Iván Balliu (2021 con otro opcional), Juan Ibiza (2022), el propio Sergio Aguza (2023), Radosav Petrovic (2022), Valentín Vada (2024), Enzo Zidane (2021), Arvin Appiah (2023) y Darwin Núñez (2023).

Al margen de los once cedidos, solo De la Hoz (tiene un año prorrogable por partidos jugados) y Corpas cumplen contrato el próximo mes de junio

De esa columna vertebral cada vez parece más evidente que el ariete uruguayo se marcharía en caso de no lograrse el ascenso a la máxima categoría, dada la buena cantidad de ‘novias’ que están apareciéndole en Primera División. Con todo, el charrúa no es el que tiene el contrato más longevo. Ese honor lo tienen el brasileño Silva, que vino procedente del Botafogo y el argentino Vada, que aterrizó desde el Girondins de Burdeos francés, ambos con vínculo hasta 2024 al rubricar un contrato por 5 años.

El resto de los jugadores, un total de once (Sivera, Francis, Maras, Ozornwafor, Costas, Kaptoum, Villalba, Coric, Lazo, Muñoz y Barbero), están en calidad de cedidos y tienen en buena medida supeditada su continuidad al hecho de lograr el ascenso a Primera, aunque no todos.

El central nigeriano Ozornwafor, por ejemplo, a préstamo desde el Galatasaray turco, parece complicado que siga debido a su pobre rendimiento. Todo lo contrario que el serbio Maras, quien sin embargo vino para este año y su club de origen, el Chaves luso, lo renovó previamente hasta 2022.

Mohamed El Assy dijo sobre el croata Coric que en verano se lo comprarían a la Roma sí o sí (eso fue antes de ver su discreto curso), mientras que el club filtró la posible compra de Lazo al Getafe por cinco campañas. Por Muñoz habría que negociar con el Getafe. Sivera, Francis, Costas, Kaptoum, Villalba y Barbero sí tienen su renovación como rojiblancos condicionada a subir a Primera.