Hay empates que saben a derrota y otros que saben a triunfo. El punto en Melilla debe saberle a los integrantes de la expedición del Polideportivo Almería a gloria debido a las circunstancias en las que el histórico tuvo que afrontar el encuentro.

Y es que en el primer minuto de juego el capitán Alberto Segura veía la tarjeta roja directa, dejando a su equipo en inferioridad, por lo que tocó remar a contracorriente durante toda la disputa celebrada en el mítico La Espiguera. 

Los almerienses lograron aguantar el 0-0 hasta el descanso con mucho esfuerzo, pero a la vuelta de los vestuarios, en el minuto 85 concretamente, llegaba un jarro de agua fría con el tanto del conjunto local, que se adelantaba así en el marcador.

Los de Carlos Hinojo no se dieron por vencido y lograban restablecer la igualada en el tiempo de prolongación gracias a un tanto de Suanes que permite a los rojiblancos de pantalón azul continuar soñando con eludir el descenso de categoría tras arrancar la fase en casa con mal pie al caer con el Alhaurino.