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Pocos creyeron en su proyecto de fiesta histórica

Todo empieza en el año 88. Se celebraba el 5º Centenario de las Capitulaciones de los Moros ante los Cristianos. Nació la idea de hacer actos conmemorativos y dentro de esos actos Carlos Cervantes, que ya había vivido estas fiestas en Calpe, tuvo la brillante idea de sugerir hacer algo parecido a las representaciones que ya se hacían en Calpe. Una Comisión compuesta por vecinos del pueblo se encarga de organizar actividades para festejar los 500 años de la toma de Mojácar por los cristianos. "Fue el germen de un homenaje continuado durante 25 años del encuentro de culturas que año tras año estrecha los lazos, no sólo entre vecinos y residentes del municipio de Mojácar sino también entre dos formas de vida que tuvieron una convivencia de 7 siglos, de las cuales todos somos herederos y, por lo tanto, conservadores de un patrimonio que ningún mojaquero dejará perder puesto que las ilusiones renovadas son semillas que crecen en el seno de las tradiciones familiares y también en el afecto y agradecimiento por las miles de personas que desde el primer año y hasta la fecha se acercan a Mojácar con el objetivo de dar calor con su presencia a un desfile de moros y cristianos con un desembarco previo en el que no hay hubo ni habrá vencedores ni vencidos". Posteriormente surgieron tres o cuatro grupos como los Moros Viejos, Moriscos, Los Sultanes, se formaron los Cristianos y poco a poco se fueron agregando otros más.

En la personalidad de Carlos Cervantes se refleja el sentir de estas fiestas, que si comenzaron gracias al esfuerzo de unos pocos, su empuje ha puesto en la cima de Andalucía a este singular desfile de moros y cristianos de Mojácar, sin paragón alguno.

con el resto de Andalucía.

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