Es muy probable que la permanencia sea cuestión de cuatro esta temporada, o al menos eso hace indicar la brecha abierta entre el noveno y el octavo, que es de una decena de puntos. En esa plaza está Trocadero de Marbella, con 32 en su haber, o lo que es lo mismo, 25 más que el farolillo rojo. Ese sigue siendo el URA, pero pese a llamarse lo mismo, el cuadro cruzado yo no es el mismo que se metió en ese lío viéndose tan descolgado. Además, esto es rugby y los 15 puntos con Olímpico, el primero de los del furgón de cola, son tres victorias con bonus, nada descabellado.

En el recuerdo queda el mes de febrero pasado, cuando Unión Rugby Almería venció por segunda vez en su historia en Madrid, precisamente en El Cantizal, en un choque inteligente, de pura estrategia, en el que además se remontó de un modo inexorable pese a viajar con bajas. El poder sudafricano del equipo de Las Rozas no pudo frenar las dos marchas más que los de Jiménez impusieron en la segunda parte, y entonces se creyó en lo que finalmente se logró, en la permanencia. Este domingo la situación es algo distinta, puesto que el rival no es un rival directo por abajo, sumando 34 puntos que lo alejan de fantasmas y conseguidos con seis victorias y nada menos que diez bonus, siete de ellos ofensivos y tres defensivos. Significado, que aprovecha cada oportunidad.

Para Unión Rugby Almería quedaban 10 finales con la entrada de año, se ganó la primera el fin se semana pasado y restan otras 9. De todas ellas hay algunas más asequibles y otras menos, pero tienen claro los unionistas que no se hay margen para desperdiciar nada. Un solo punto logrado en El Cantizal será muy bueno para la cuenta definitiva, sabiendo que quedan tres salidas y seis, el doble, defensas del fortín del Estadio Emilio Campra.