El agricultor es el protagonista absoluto. Esa es la nueva filosofía de la compañía suiza Syngenta, que presentó hace dos meses en Madrid su nueva estrategia global de empresa, culminando así el camino que inició hace dos años, precisamente en la edición de Fruit Logistica de 2011, con la puesta en escena de Syngenta Growing System, que le reportó un incremento de su cotización en Bolsa de más de un 14%.

De esta forma, Syngenta desembarca en Fruit Logistica 2013 con una recién renovada estrategia global, cuyo hilo conductor es el agricultor. Sobre él giran todos los productos y servicios de la compañía, que ofrece de esta forma una respuesta integral y a la carta a todas las demandas del campo, ya sea en innovación, semillas, características del producto (resistencia a plagas, color, sabor, vida útil), en uso de agentes biológicos y fitosanitarios, asesoramiento a pie de finca y un largo etcétera, aportando un notable incremento en el valor añadido de toda la cadena agroalimentaria.

Bajo el loable objetivo de incrementar la rentabilidad de la empresa, Syngenta busca ganar más dinero, eso sí, haciendo que lo ganen también los agricultores, gracias a estas soluciones en forma de productos y servicios, lo que le garantizará a la compañía un aumento en la fidelidad hacia su amplia oferta y repercutirá en los objetivos corporativos a medio y largo plazo.

Con estos mimbres de acercamiento al productor en origen, la multinacional basará su estrategia en tres ámbitos de trabajo. Por un lado, la integración, mostrando una sola cara al cliente, una oferta única en cada área específica y una imagen a escala global; la innovación, más allá de productos individuales, apuestas específicas para cada cultivo y asociaciones y alianzas con centros de I+D e instituciones punteras; y la superación, dirigida hacia el productor en origen, aumentando la cuota de mercado y obteniendo un crecimiento rentable.

El objetivo global de Syngenta con esta nueva estrategia pasa por superar los 12.400 millones de dólares de facturación con los que cerró el ejercicio 2011 hasta alcanzar los 22.000 millones en el horizonte temporal de 2015, duplicando las ventas destinadas al sector hortícola e incrementando en torno a un 40% la participación de la firma en el mercado mundial.

El grupo cerró 2011 con unas ventas de 13.300 millones de dólares, con el maíz y los cultivos especializados como principales áreas de negocio, con 2.700 y 2.200 millones de dólares, respectivamente, seguidos de las hortalizas, que aumentaron un 5% y la soja, con 2.000 millones cada uno; los cereales registraron 1.600 millones de dólares; césped y jardín, 1.300 millones; los cultivos diversos extensivos, otros 1.300 millones; el arroz, 500 millones; y la caña de azúcar, 200 millones.

El área de negocio de las hortalizas, aunque no supone un papel protagonista dentro de las diferentes áreas de negocio de la compañía, sí suponen el segmento de producción que mayor valor económico aporta a toda la rama agrícola a escala mundial, de ahí el enorme potencial que este sector posee para todas las empresas dedicadas a esta actividad, entre ellas, la propia Syngenta.

El valor de la producción mundial de hortalizas es de 500 millones de dólares, con un enorme potencial en los mercados emergentes, que aún no cuentan con productos sofisticados, es decir, mínimamente procesados, que es donde se encuentra alrededor del 80% del valor final.

Los retos que se plantea Syngenta en el segmento de las hortalizas buscan satisfacer las necesidades existentes en materia de mejora de rendimientos, ya sea en cuanto a productividad o márgenes, así como en calidad, seguridad alimentaria, vida útil, sabor, además de atractivo del producto.

La respuesta integral de Syngenta en hortícolas está al servicio de toda la cadena de valor de la alimentación; desde el consumidor hacia atrás, hasta llegar al agricultor en origen, al que la compañía suiza cubrirá sus necesidades, gracias a sus conocimientos y experiencia en materia de genética, protección de cultivos, tratamiento de semillas, biocontroles y soluciones agronómicas.

Todo ello, con el objetivo de cubrir las necesidades del consumidor, tanto las del 85%, que no busca un producto diferenciado, como las del restante 15%, que está dispuesto a pagar un poco más caro, y que genera el 50% del volumen de negocio mundial de hortalizas.

Como resultado de la apuesta por la investigación en materia hortofrutícola, Syngenta fue galardonada el año pasado con uno de los Fruit Logistica Innovation Awards, premios que cada año entrega el certamen hortofrutícola de Berlín a los productos más innovadores del año. La multinacional suiza recibió este premio por su 'Angello', un pimiento mini sin semillas, mucho más dulce de lo normal, un 25% más que un pimiento convencional, ideal para meriendas y desayunos, enfocado para mercados extranjeros con una larga cultura gastronómica en uso de hortalizas como aperitivo, llegando, incluso, a venderlas a través de máquinas expendedoras.

Además, el año anterior, en la edición de 2011 de Fruit Logistica, la empresa ya estuvo nominada a estos mismos premios, entonces, por 'Angelle', un tomate con forma de dátil, con un gran sabor, aroma y durabilidad, más de un mes sin perder sus características organolépticas, además de que se puede cultivar durante todo el año, lo que le permite servir a los mercados internacionales los doce meses del año.