Había que dar el ‘do de pecho’, sacar el carácter y cerrar filas… y se hizo. Cancha de las difíciles, la del Matilde de la Torre, si bien es cierto que no como siempre ante la ausencia de su entendido público. También hubo bajas locales dentro de la pista. Por el lado ahorrador, el positivo de Colito, descubierto ‘a última hora’, dejaba más tocados a los de Manolo Berenguel, ya de por si precavidos tras no haber entrenado los días previos ni Esteban Villarreal, ni Charly Jiménez, ni Marlon Palharini. Los dos primeros fueron titulares y jugaron todo el partido, recibiendo descanso Ignacio Sánchez ante unos inoportunos problemas de espalda, y saliendo el alicantino a su posición habitual de receptor, tapando el hueco hasta ahora ocupado por Javier Jiménez. El cubano fue el encargado de sustituir al opuesto internacional, que será baja también en Lugo y puede que en los encuentros de la próxima semana.

Jiménez fue el máximo anotador, acompañado por Fran Iribarne, ambos con 13 tantos en su haber, destacando el receptor almeriense especialmente al servicio. Hizo cinco saques directos, siendo una faceta del juego en la que los verdes brillaron quizá con más intensidad que hasta ahora en todo lo que va de Superliga, con ocho en total, mientras que el bloqueo más o menos se mantuvo. La diferencia respecto a las otras ocasiones anteriores radicó en el buen rendimiento del rival, que mantuvo el pulso a las torres ahorradoras e incluso hizo uno más en el cómputo general (9 frente a 8). También fue muy bueno el nivel de recepción, con Charly Jiménez ofreciendo el mejor dato tanto en positiva como en perfecta. Respecto al porcentaje de ataque, el registro que en gran medida depende del colocador, Villarreal pudo irse satisfecho.