Después de varios años sin excesivas alegrías, el CV Almería ha vuelto a ocupar el lugar más alto del voleibol español en un gran año, que le confirma como el mejor club nacional dados los éxitos que ha obtenido a lo largo de estos últimos doce meses.

El título de campeón de Copa del Rey, conseguido en Almería en el mes de marzo, hizo que el club que preside Ramón Sedeño volviera a saborear las mieles del triunfo y a celebrar un título en casa, algo que no hacía desde 2005 cuando conquistó su última Superliga, entonces en el Pabellón Rafael Florido.

Ahora, en el Moisés Ruiz, más acogedor y contando con el respaldo de la afición, el equipo ahorrador vuelve a ser temible. A ese título añadió, en este gran año, el subcampeonato de la Superliga y la presencia en la Final Four de la Copa CEV europea, siendo semifinalista.

Fueron los cimientos de lo que es ahora. En el comienzo de la nueva temporada, el Unicaja Almería es el líder intratable e indiscutible de la máxima competición nacional, contando por victorias la totalidad de sus partidos, y aventajando en once puntos (en la liga regular) al vigente campeón liguero. Además, el club ha vuelto a la CEV Indesit Champions League, donde aún guarda esperanzas de clasificarse para la siguiente fase.

Pero los éxitos del club no acaban con el primer equipo. Pese a haberse visto obligado a prescindir del equipo filial masculino en la Superliga 2, los junior hicieron historia al ser los primeros campeones de la Superliga junior, creada esta pasada temporada. La unión del CV Almería con el Univoley hizo también que el equipo femenino de 1ª División Nacional engrosara la lista de triunfos del club, proclamándose campeón de su categoría por segundo año consecutivo, aunque, también por segundo año consecutivo, la falta de medios provocara que el equipo no pudiera completar su ascenso a la Liga FEV. Este año sigue intentándolo.