Era la jornada 1, allá por el 16 de septiembre pasado, cuando ganó por primera y última vez el histórico club madrileño. El resultado fue de 31-7 en uno de los numerosos derbis de Madrid, el disputado frente al Sanitas Alcobendas B. Desde entonces todo han sido derrotas, si bien tiene 9 puntos en su casillero, tres más que URA, porque en cuatro de los seis partidos ha logrado sumar. En ese sentido, son cinco los bonus conseguidos, de los que dos han sido ofensivos, uno en su única victoria, y tres defensivos. La distancia que media entre Arquitectura y URA, que igualmente solo ha logrado un triunfo, se debe a que los cruzados solo han sumado en dos de las seis jornadas, cuatro por ganar a Extremadura y dos ante Olímpico.

Precisamente esa circunstancia está siendo la asignatura pendiente de un XV que sin embargo progresa adecuadamente, la de transformar en puntos todo lo que se desarrolla sobre el terreno de juego. Nacho Pastor, el preparador de los unionistas, quiere aprobarla de una vez por todas en Puerta de Hierro. El XV almeriense quiere resarcirse en un escenario en el que en su primera temporada en División de Honor B escribió uno de los más grandes capítulos de su corta historia, primera victoria en Madrid, primera ante un grande, y con una patada que tocó el palo y entró en la última jugada. Es una de esas imágenes icónicas que quedan para la posteridad y que vienen a decir que es posible, que ya se ha hecho y que el objetivo es repetirlo, como también se le ha ganado en Almería.