juan martínez oliver. exciclista profesional

"Me cuesta creer que subí al pódium en el Tour"

  • Analiza con satisfacción la XI Marcha Cicloturista que lleva su nombre 1988: un año que nunca olvidará

-Satisfecho otro año más con su marcha cicloturista.

-En cuanto a la participación y los invitados que hubo, fue un éxito. Todo es mejorable y me quedo con eso, con que hemos tratado de mejorar fallos de ediciones pasadas.

-Cubino y Perico harían las delicias de los participantes.

-El homenaje fue a Lale Cubino y Perico como siempre está invitado. Pero no me olvido de Santi Blanco o Pedro Antonio Sánchez, que se merecen también un respeto. Conseguir que en una marcha cicloturista haya cuatro exprofesionales es un punto a favor. Si yo fuera un simple aficionado, saber que voy a compartir 115 kilómetros y que voy a estar con ellos en la salida y en la llegada, creo que merece la pena. Además, son muy campechanos: se han echado fotos, han recordado anécdotas en la comida...

-Además, la orografía de Almería invita a estas marchas.

-A pesar de ser 115 kilómetros, el recorrido fue muy bonito, y por mí hasta lo ampliaría más. En mis años de ciclista profesional me decían que no entrenarían aquí porque no había subidas. Pero cuando venían la gente se quedaba sorprendida y repetía.

-Por lo que veo, la bicicleta lo mantiene todavía a tope.

-Ahora me he tirado un tiempo malo porque me ha llevado muchas horas organizar la marcha. Me gusta salir, intentar mantenerme y rodar todos los sábados con la Unión Ciclista Martínez Oliver. La bicicleta es demasiado dura y si no entrenas, lo pasas luego muy mal.

-Se sienta delante de la televisión, ¿qué siente cuando ve la 'serpiente multicolor'?

-Ahora viene el Tour de Francia y recuerdoque el penúltimo día de la edición en la que participé, subí a ese pódium. Ahora me cuesta trabajo creérmelo. Estoy también en la Vuelta a España como asesor técnico y eso me da la posibilidad de vivirla en directo desde un coche.

-Francia, verano de 1988.

-Ese mismo años que gané la contrarreloj en Saint Etienne, Perico Delgado venció el Tour. Entre unos y otro nos decían que nos diéramos un beso, al final se lo di y a partir de ahí nuestra amistad fue a mucho más. Esa fotografía dio la vuelta al mundo.

-Ávila, verano de 1988.

-También pude conseguir una victoria en la Vuelta a España. Ese año fue espectacular porque nació mi hija, 1988 está marcado a fuego en mi vida.

-También tiene una experiencia en los Juegos de Atlanta.

-Me di por satisfecho porque conseguí diploma en las dos pruebas en las que participé. Pero tuve unas molestias en los últimos días porque una medalla, sobre todo en individual, era mía. De hecho, había sido vencedor en la Copa del Mundo. En los últimos tres días no me encontré bien, no me gustó la Villa Olímpica, la alimentación y me vine abajo con la buena temporada que había hecho.

-¿Hay algún Juan Martínez Oliver en la cantera almeriense?

-Ahora mismo está Antonio Valero, que corre en la Fundación Contador. Su padre es de mi época, rodaba conmigo, y le deseo mucha suerte.

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