La traición de los consejeros de Abengoa elegidos el pasado martes a los accionistas que les votaron, como alternativa a la propuesta hecha por la dirección presidida por Gonzalo Urquijo en la víspera de su cese, no ha hecho que los minoritarios bajen los brazos, ni siquiera después de que el nuevo consejo de administración se alienase ayer con las tesis del propio Urquijo.

Antes al contrario, su candidato a presidir la compañía, Clemente Fernández, comenzó a recabar este miércoles adhesiones a una sindicatura de accionistas, con el objetivo de este pacto parasocial se convierta en el primer accionista de la multinacional. 

Pese al puente por la Navidad, la intención del empresario cántabro es aglutinar en pocos días entre un 14% y un 19% del capital social en tonrno a esa sindicatura de minoritarios y comunicar la sindicación el mismo lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Hasta ahora el único accionista con participación significativa era el Estado, con el 3,5% del capital.

La sindicatura se marca como primer objetivo convocar una nueva junta para destituir al consejo que ha traicionado a los accionistas y elegir a otro que ya presidiría Clemente Fernández. La intención es que el pacto parasocial se mantenga mientras las acciones de Abengoa sigan teniendo suspendida su cotización.

Estas acciones societarias irán paralelas a la denuncia en la Fiscalía de los hechos acaecidos en los últimos dos años en Abengoa, que los minoritarios consideran que pueden ser constitutivos de delitos de administración deseleal y alzamiento de bienes.

Los minoritarios han ganado las dos útlimas juntas de accionistas gracias a que estaban hasta ahora agrupados en la plataforma Abengoashares, que precisamente este miércoles ya anunció también en un comunicado en el que rechaza a Juan Pablo López-Bravo como presidente de la compañía y anuncia acciones legales si el nuevo consejo no elige a Clemente Fernández, ex presidente de Amper,  nueva cabeza visible de la compañía.