Nadie quiere un futuro que se desarrolle como describió El rebaño ciego, la anticipadora novela de John Brunner. Incluidos los responsables de los consejos de administración de las entidades bancarias, que han puesto en marcha en mayor o menor medida planes para impulsar la economía sostenible tanto desde un punto de vista medioambiental como social.

El director global de Negocio Responsable de BBVA, Antonio Ballabriga, incidió ayer en Santander sobre los esfuerzos de su entidad por estar alineada por el Acuerdo de París. El directivo de BBVA incluso pronosticó que a medio plazo los bancos tendrán que pasar pruebas de sostenibilidad, ya que el cambio climático también amenaza sus resultados económicos. "Hay riesgos físicos por los posibles desastres naturales y también por las actividades productivas que se pueden ver afectadas" adelantó.

El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, también se mostró a favor unos minutos antes de que estos riesgos se incluyan en los próximos test de estrés.

Ballabriga quiso dar la adecuada importancia a esta problemática global. "Los objetivos de desarrollo sostenible suponen una transformación a la misma escala que la digitalización, pero en este caso nos jugamos todos mucho más", sentenció.