Pase lo que pase mañana en las urnas, Vera cambiará de alcalde en junio. La retirada de la política del actual regidor, Félix López, suma más incertidumbre si cabe a unos comicios que en las últimas dos legislaturas han tenido unos resultados muy igualados.

Tras la disolución del Partido Andalucista, que se produjo poco después de las elecciones de 2015, el que haya sido alcalde de Vera durante 20 años tenía que tomar una decisión de cara a estos comicios: presentarse con otro partido (no faltaron los cantos de sirena de PSOE y Ciudadanos), presentar una lista independiente, o dar un paso atrás. López eligió la última vía y dice adiós tras más de tres décadas de servicio público para “dedicar más tiempo a la familia y amigos”, aseguró en su despedida.

Su retirada deja un nuevo escenario en Vera, inédito los últimos 24 años: la ‘lucha’ entre un Partido Popular que ya sabe lo que es gobernar (lo hizo en la legislatura 2011-2015) contra un PSOE resurgido de sus cenizas y que aspira a ser el recogedor de los votos del PA.

Echando la vista atrás, lejos quedan los tiempos de mayorías aplastantes del PSOE, primero, y del PA, después. La última vez fue en 2007, cuando Félix López lograba 11 concejales, el PSOE 4 y el PP 2. Con la llegada de la crisis, y con José Carmelo Jorge como candidato, los populares cogieron fuerza y en 2011 alcanzaron su récord de votos en unas municipales en Vera, con 2.290 sufragios que le dieron 8 concejales. El PA obtuvo 7 y el PSOE 2. Así, con la abstención de los socialistas, el PP lograba por primera vez la Alcaldía veratense.

Cuatro años después, y con los mismos protagonistas encabezando sus partidos, se repitieron los mismos resultados (8 PP, 7 PA y 2 PSOE), aunque esta vez las dos fuerzas de izquierdas llegaron a un acuerdo para gobernar en coalición, recuperando así Félix López la vara en la que ha sido, al menos de momento, su último mandato.

Cinco partidos se presentan

Así se llega ahora a las urnas, con un desenlace difícil de augurar. En los colegios electorales los más de 10.000 veratenses censados encontrarán cinco papeletas.:PP, PSOE, Adelante Vera, Ciudadanos y VOX.

En el Partido Popular repite, por tercera vez consecutiva, José Carmelo Jorge. Cuenta con el aval de haber sido alcalde y haber ganado (en número de votos y ediles) las últimas dos elecciones.

El PSOE llega muy renovado, con el exgerente de banca Martín Gerez a la cabeza, más de treinta años después de haber sido concejal. Llega avalado por sus años en cargos directivos en una importante entidad bancaria y en su lista ha integrado a tres concejales del PA, por lo que presenta un programa continuista pero con su sello propio.

El candidato de Adelante Vera (Podemos, IU e independientes), es José Antonio Ramos, avalado por su labor en diferentes asociaciones ecologistas y vecinales. Durante esta legislatura han mantenido una posición muy crítica con el equipo de gobierno.

En Ciudadanos, el candidato es Alberto Requena. Los naranjas, que ya se presentaron en 2015 (160 votos) confían en ver reflejado en las municipales su buen resultado de las generales, donde lograron 1.188 papeletas. No obstante, el perfil poco conocido de su candidato y una campaña bastante discreta, parece relegarles a una posición residual.

Por último, Vox presenta al almeriense Leonardo García, vinculado a la fundación católica Artcupa, pero desconocido en el municipio. De hecho, no ha celebrado ningún acto público durante la campaña en la localidad. Como Cs, intentarán aprovechar el tirón de las generales, donde tuvieron 1.059 votos.

Así las cosas, mañana en las urnas se resolverán todas las dudas. ¿Hacia dónde irán los 2.117 votos que logró el PA? ¿Irán a los partidos de izquierdas, PSOE o Adelante, o pesará eso de que en los pueblos se vota a la persona y no al partido? ¿Mermará Ciudadanos y Vox los resultados del PP como en las generales? ¿Logrará resurgir el PSOE tras ocho años con solo dos ediles? ¿Tendrán Cs, Vox o Adelante la llave de la investidura?

Mañana los veratenses hablarán, pero habrá que ver si lo hacen masivamente o si, como ocurrió en las generales, se registra una de las tasas de abstención más altas de la provincia. Eso también puede ser clave.