Entrevista a Francis Debeuckelaere, presidente de Bacardi Europa

"Ahora se bebe menos, pero mejor"

  • La compañía de marcas como Ron Bacardi o Martini presenta la iniciativa formativa 'Shake your future' para formar a a jóvenes empresarios de hostelería

El directivo Francis Debeuckelaere

El directivo Francis Debeuckelaere / Ogilvy

El directivo belga Francis Debeuckelaere además de MBA por la Universidad de Lovaina tiene un máster en Lenguas Románicas y habla neerlandés, inglés, francés y español. Todo ello contribuye a esa mentalidad sin fronteras que aporta a su presidencia del grupo Bacardi en Europa, con sede en Ámsterdam, cargo que ocupa desde 2017 tras haber ingresado en esta compañía en 1994. Anteriormente ocupó puestos de marketing en Nestlé y en la cervercera Alken-Maes (Heineken Internacional). Presenta en España la iniciativa Shake your future por la que Bacardi promueve la formación de jóvenes en la hostelería

–Presenta el programa Shake your future por el que Bacardi fomenta la formación de jóvenes en la hostelería ¿ya era hora que nos centráramos en la calidad de empleo de las nuevas generaciones?

–El desempleo juvenil en Europa llega a rondar el 15%, cifra que sube más en España. Tenemos que fomentar el empleo juvenil en todas las empresas. La mirada de mi compañía debe dirigirse a la hostelería y a un concepto del alcohol en el que se bebe menos, pero mejor. Es una tendencia de hoy y de futuro.

–Hay que cambiar los conceptos sobre el alcohol.

–El consumidor ha cambiado. En Bacardi somos una compañía familiar y no tenemos acciones en el mercado bursátil. Nos permite otra sensibilidad, como crear estas acciones sociales.

–¿Cómo surgió Shake your future en Francia?

–Era una manera de entregar a la sociedad parte de lo que nos ha dado. Hemos empezado por París, Roma y Barcelona con un Bartender School de formación que se ampliará a otras ciudades, doce en total. Hasta 2023 tenemos previsto la formación de un millar de cocteleros y barman de primera línea. Una coctelería de calidad, con preparación, es un pilar en la gastronomía actual.

–¿La generación de jóvenes de hoy en toda Europa tiene difícil hacerse un hueco?

–Yo soy de la generación del Baby Boom y tuvimos nuestras dificultades aunque hallamos nuestro sitio más o menos pronto. Pero los jóvenes de hoy lo tienen más complicado. Yo tengo tres hijos universitarios y me imagino que hallarán su camino. A mí me preocupan esos jóvenes que quieren montar un negocio de hostelería y sólo encuentran obstáculos.

–¿Qué se puede hacer por ellos, más allá de la iniciativa de una empresa?

–Los bancos pueden hacer mucho aún en pro de esos nuevos negocios, en pro de las ideas. En Bélgica hay fondos posibles. Podría entender que ante el riesgo financiero un banco no quiera invertir en ideas sin experiencia detrás, pero en algún momento habrá que arriesgar. En este sector se unen todos los riesgos: juventud, hostelería y falta de experiencia. Por eso son decisivas iniciativas de formación para la calidad profesional.

–¿No es más riesgo tener a tantos jóvenes sin posibilidades de futuro? Es un drama social latente.

–Hay que ponerse en el papel de esas familias que ven a sus hijos durante varios años sin poder encontrar un empleo o sin posibilidades de montar un negocio. Los gobiernos tienen que asumir más medidas y las respuestas deben ser de proximidad, como los ayuntamientos. Barcelona Activa es el organismo que ha participado en el primer Shake your future en España.

"La obsesión de Ferrán Adriá es analizar cómo gestionar un bar y no fracasar. Dos de cada diez establecimientos cierran antes de los dos años y cinco de cada diez, a los tres"

–¿El sector de la hostelería en España, aunque ha evolucionado, tiene que aumentar en calidad y exigencia?

–La profesionalidad es indispensable para el éxito y la calidad en la hostelería. En España se ha mejorado mucho. Los empresarios de hostelería tienen que ser cada vez más un bussinessman, con una formación en la gestión completa de un negocio, que sólo despachar café y copas. Con Ferrán Adriá la firma Bacardi ha promovido la Bullipedia y el segundo tomo se centra exclusivamente en la gestión empresarial de un bar, porque es necesaria esa formación, además de saber hacer cócteles.

–Lo habitual es fracasar.

–La obsesión de Adriá es analizar cómo gestionar un bar y no fracasar. Dos de cada diez establecimientos cierran antes de los dos años y cinco de cada diez, a los tres. Desde las empresas suministradoras podemos ayudar mucho en el asesoramiento para que un negocio sea un éxito. Es decir, no podemos limitarnos a entregar un pedido, sino explicar cómo ganar más dinero: cómo hacer un buen cóctel, ser más atractivos y originales ante un cliente. En eso podemos contribuir mucho. Bacardi trabaja con más de 100.000 clientes y no sólo podemos vender, tenemos que ayudar, debemos tener mentalidad de socio, y lo estamos haciendo. También contribuimos con nuevos productos. Por ejemplo, lanzamos el Martini sin alcohol, una bebida que puede ser más interesante, para el hostelero y para el cliente, que un simple refresco.

–La hostelería, de media, es la profesión con más horas. Hay que tener vocación, cariño por el servicio.

–Se suele trabajar cuando nadie trabaja. Tiene que ser más que una vocación, debe ser una pasión.

–¿El consumidor tiene otra relación con las bebidas?

–El consumidor ha cambiado por completo. Ya no se conforma con un par de cosas. Estamos en el comienzo de una explosión de marcas, de variedades, que es lo que pide el cliente, que también tiene más experiencia sobre sus gustos. En la sobremesa y en la noche han hecho más presencia bebidas como el ron, la ginebra, el tequila, con calidad premium, con combinaciones más selectas. El futuro pasa en parte por cócteles con tirador, como la cerveza. La tecnología abre nuevas oportunidades.

"Se suele trabajar cuando nadie trabaja. Tiene que ser más que una vocación, debe ser una pasión"

–El alcohol ya no es sólo para la noche.

–En España, y en Andalucía en concreto, sois sabios. Disfrutáis del aperitivo, de la sobremesa entre amigos. En el resto de Europa están aprendiendo de vosotros. Y toma fuerza la tarde, el after work. Es otra relación, con mucho más relax e inteligencia, con el alcohol. Hay un cambio hacia el day-life y con ideas de intercambiando entre los jóvenes, que viajan mucho. Europa levantó las fronteras también para la diversión. El vodka rojo surgió en las estaciones de esquí de Austria y tardó dos años en popularizarse por todas partes.

–No sabemos si este año tendremos ferias, pero son un ejemplo de cómo disfrutar de una fiesta, brindando a lo largo del día.

–Son fiestas para aprender de ellas. De Andalucía también hay que aprender sobre cómo disfruta la noche. Lanzamos cada año seis o siete productos porque el consumidor pide nuevas experiencias para todos esos nuevos momentos de ocio.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios