La secretaria general del Partido Popular y presidenta del PP de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha "suspendido" al Gobierno de Zapatero en economía y en política exterior, en un balance del año 2009.

En un repaso de lo que ha sido el año, antes de presidir la Junta de la Directiva provincial del PP de Toledo, a la que ha dado cuenta de las estrategias para el año próximo y un balance en nuestro país y en Castilla-La Mancha, Cospedal destacó que el reto "más importante" que se fija el PP para el 2010 es luchar contra el paro.

Su preocupación, dijo, son los 4,5 millones de parados que "lo están pasando francamente mal" y que el PP hará "todo lo posible" para que "puedan encontrar un puesto de trabajo". El PP se centrará en reducir "esa cifra doliente y bochornosa para un Gobierno" de casi 4,5 de parados.

Cospedal señaló que las propuestas del Gobierno Zapatero "inmediatamente han dejado de tener validez" y puso como ejemplo el fracaso de la ley "estrella" de Economía Sostenible "de la que casi el 70% de los españoles opinan que no va a tener ninguna repercusión en nuestra reactivación económica".

"La improvisación de Zapatero no va a servir", manifestó, para criticar de paso, también, a la otra ley estrella socialista, la del aborto, aprobada "lamentablemente" hace pocos días "con el apoyo de algunos partidos políticos que tendrán que explicar a su militancia el contenido y el fundamento de ese apoyo".

El otro punto donde centró sus críticas al Gobierno de España fue en política exterior, y particularmente en las actuaciones de Zapatero en los casos de Gibraltar y Marruecos.

Sobre Gibraltar, expresó que "el Gobierno está haciendo todo lo contrario de lo que hay que hacer" para defender su "soberanía", la posición siempre adoptada por nuestro país, "dando carta de naturaleza" a las actuaciones del gobierno gibraltareño.

"Los constantes ataques a la soberanía de España por el Gobierno de Gibraltar es una muestra de la falta de objetivos y criterios", denunció, para lamentar seguidamente la resolución que se ha producido sobre el asunto de Aminatu Haidar.

En este punto desveló que el Ministro de Exteriores conocía "desde el primer momento" que sería expulsada de Marruecos y, por ello, el Gobierno "ha engañado conscientemente a toda la opinión pública española".

Además, "por primera vez en la historia de nuestro país" se ha reconocido públicamente "aunque sea de manera implícita" la soberanía de Marruecos sobre el Sahara español, algo "que las autoridades diplomáticas españolas nunca se habían atrevido a hacer anteriormente".