COn un salón de plenos lleno de autoridades y ciudadanos asiduos a este acto año tras año, los almerienses volvieron a rendir homenaje a los 25 Coloraos, los mártires de la libertad que fueron sacrificados por el feroz despotismo en el año 1824 cuando llegaron a la costa de la capital con el afán de recuperar la Constitución de 1812. Los fusilaron de rodillas y por la espalda, uniformados con casacas rojas. Murieron por defender la libertad.

Precisamente es a ese espíritu luchador y de libertad al que se le rinde homenaje cada 24 de agosto durante la semana grande de Almería, el sentimiento que ayer tanto el alcalde de la ciudad, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, como el orador Emilio Contreras, definieron como "la máxima aspiración del hombre" en sus respectivas intervenciones.

Rodríguez-Comendador recordó aquella intentona que el paso del tiempo y la voluntad de las personas ha convertido en una tradición municipal solemne y popular. "Para los almerienses, el homenaje a los llamados mártires de la libertad constituye una de las tradiciones que no por reciente es menos sentida o menos significativa. La defensa de las libertades es una labor en la que todos debemos sentirnos involucrados, partiendo del convencimiento de que en el fomento de su prevalencia radica la garantía para asegurar la paz, la justicia, el progreso y la mejor convivencia", señaló el regidor.

Como uno de los más sólidos analistas de la vida política, social e informativa de España, fue como el alcalde presentó al orador de Los Coloraos, el periodista y abogado Emilio Contreras, como. Dijo de él que es un hombre "comprometido con la tolerancia y que ha sabido hacer del respeto a la discrepancia las coordenadas con las que trazar una trayectoria brillante".

Y brillante fue también el discurso de este orador de raíces almerienses que supo mantener en silencio a la multitud que llenó el salón de plenos con un magistral recorrido por la historia de España desde aquel episodio histórico de Los Coloraos hasta la actualidad, para explicar el misterioso concepto de libertad. Incluso haciendo un símil de lo que ocurría en el siglo XIX con historias de la vida de hoy, no solo en nuestro país, sino en América, Asia o África, donde los hombres siguen luchando por conseguir la ansiada libertad. Un sentimiento que está unido a la humanidad inevitablemente y, como indicó el orador "una de las aspiraciones que más han hecho reflexionar a los hombres".

Emilio Contreras señaló que "por la búsqueda de libertad han muerto muchos hombres y mujeres, pero gracias a ellos hoy en día somos más libres. Nos costó la inestabilidad de cinco constituciones en solo 64 años, entre 1812 y 876, y el sufrimiento desgarrador de tres guerras civiles en 42 años, entre 1833 y 1875". Continuó con análisis de las dificultades del siglo XX, con dos guerras mundiales y una guerra civil, para certificar que hoy en día, "gracias a la Constitución de 1978 en España existe libertad".

El orador advirtió que desde entonces se han sucedido numerosos avatares que han puesto en riesgo lo conseguido y señaló precisamente a la reciente crisis económica como uno de los problemas que "puede empujar a los hombres y mujeres a renegar de la libertad en aras de tener seguridad, como lo hicieran nuestros antepasados en los años 30".

Aún así, insistió antes de concluir su discurso, "pese a todas las amenazas, la libertad es imparable, incluso cuando no se tiene, porque el ansia de tenerla o la angustia de perderla nos hace seguir en su búsqueda".

Acto seguido, el alcalde de Almería impuso al orador el Escudo de Oro de la ciudad, para dar paso a la ofrenda de coronas de laurel y rosas rojas en el monumento a esos mártires de la libertad que se erige en el centro de la Plaza de la Constitución. Autoridades políticas, civiles y militares presenciaron el solemne acto, en el que la Banda Municipal interpretó La Marsellesa, el Himno de Riego, el Himno de Andalucía y el Himno Nacional. Fueron muchos los almerienses y turistas que se acercaron hasta el monumento a lo largo del día.