El Festival de Cine Iberoamericano y el Área de Cultura de la Universidad de Huelva celebraron ayer un debate en el salón de actos de la Facultad de Derecho en el que se analizó la actual situación de la industria cinematográfica española. El eje del coloquio fue el documental La pantalla herida, una obra de Luis María Ferrández, que acudió a la charla con Pedro Castillo Arteta, director del festival, Belén Bernuy y Montse Portabella, productoras de cine.

La pantalla herida es una película documental que muestra "una mirada inédita, plural y precisa sobre el cambio de modelo y la crisis en el cine español como nunca antes se había intentado narrar", según Luis María Ferrández. En ella, más de 50 profesionales del cine español de las últimas décadas debaten abiertamente sobre los problemas que afectan a la profesión.

Para el director del documental, algunas de esas dificultades han sido "la falta de autocrítica, la falta de interés por la difusión, la desvertebración en la profesión o la transmisión de ciertos clichés desafortunados que han afectado al cine español en general".

Ferrández cree que "se ha instaurado la queja por encima de buscar un punto de encuentro donde se dé espacio a la voz de nuestro cine".

Sobre ese hilo siguieron debatiendo el resto de participantes. Así, Belén Bernuy criticó que "hasta hace poco ha primado en algunos sectores del cine la búsqueda de una subvención que permitiera mantener a la productora y a los creadores de la película por encima de darle importancia a la difusión".