La provincia almeriense contaba con una población femenina de 346.996 mujeres a fecha de enero del pasado año, un 0,27% más que el año anterior y lo que representa un 8,17% de la totalidad andaluza; de ella el 17,5% es extranjera lo que supone el 20,47% de la población femenina foránea en la comunidad. El Observatorio Argos, dependiente de la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio, ha publicado recientemente su estudio 'La Mujer en el Mercado de Trabajo Andaluz. 2017' en el que hace una radiografía por provincias.

En este sentido, indica que la media anual de afiliadas a la Seguridad Social en Almería era de 118.176, un 3,86% más que en el año anterior. En su mayoría se agrupan el Régimen General (77.877) que incrementa la afiliación en un 4,71% y en el Régimen Especial de Autónomos (20.677) que suma un 2,55% más. Esta proporción no es extrapolable si diferenciamos entre mujeres extranjeras, que si bien el mayor grupo pertenece al Régimen General (7.837), no sucede lo mismo con el segundo régimen mayoritario que en este caso es el Régimen General del Sistema Especial Agrario (7.470 afiliadas).

De acuerdo a lo expuesto en la publicación, de media en 2017, la población femenina activa ascendía a 149.500 personas (un 0,47% más que en 2016), de las que 41.600 estaban paradas, lo que supone un 13,31% más que en el ejercicio anterior. Respecto a la tasa de empleo femenina, ésta ascendía a 38,21% un 1,71% menos que en 2016 y la tasa de paro a 27,82%, un 3,15% más.

En cuanto a la contratación, 2017 cerraba con 147.525 contratos realizados a mujeres, un 8,48% más que en 2016; en su mayoría fueron destinados a la población femenina de entre 25 y 44 años (82.037). El nivel formativo mayoritario de las mujeres que formalizaron contratos el pasado año era de estudios secundarios. El 79% (116.663) de los contratos se corresponden con el sector servicios, principalmente referentes a ocupaciones elementales (69.359) y para servicios de restauración, personales, protección y vendedores (44.270).

Al igual que sucede con los hombres, la temporalidad sigue siendo un handicap también en lo que respecta a las mujeres. Así del total de contratos registrados en el último ejercicio, 139.470, es decir, el 94,53% fueron temporales, esto supone un aumento del 8,31%, frente a los 8.055 formalizados con carácter indefinido, que también subieron un 11,46%.

En cuanto a las ocupaciones más contratadas en 2017, encabeza el ranking la de peones de las industrias manufactureras (el 13,1%), seguido de peones agrícolas (12,82%) y camareras asalariadas (12,52%). Respecto a las ocupaciones contratadas que más han crecido en el pasado año, a diferencia de 2016 que fue la de las camareras asalariadas, la que encabezaba la lista fue la de peones agrícolas seguida de peones de industrias manufactureras y monitoras de actividades recreativas y de entretenimiento.

A 31 de diciembre de 2017 había en Almería 32.257 mujeres paradas registradas, un 2,72% menos que en 2016, siendo el grupo mayoritario el que corresponde a una población femenina entre 25 y 44 años (16.054). El 72,89%, es decir 23.513 mujeres demandantes de empleo, proviene del sector servicios.

En todas las actividades ha descendido el paro, principalmente en las construcción, -10,31%. Al igual que sucede en las contrataciones, las ocupaciones elementales y los servicios de restauración, personales, protección y vendedores, son las que más paradas acumulan.

Uno de los grandes problemas reside en el tiempo que llevan como demandantes de empleo, ya que el 41,67% de las paradas llevan más de un año apuntadas a la lista del paro.

Como es natural, por ser el núcleo con mayor población en general, es la capital almeriense la que posee el gran número de mujeres, 100.345, de ellas el 10,45% están en paro. Los otros dos municipios de esta provincia que suman la mayor población femenina son en este orden Roquetas de Mar y El Ejido, ambos en el poniente. En el primero hay 445.183 mujeres, de las que el 10,7% se encuentra como demandante de empleo; mientras que en el segundo hay 41.377 de las que el 7,73% está en situación de paro respecto al mercado laboral.