Pasarela

Una botella rosa con toda la intención

  • Edición limitada en favor de las mujeres con cáncer de mama en una iniciativa de Solán de Cabras con la artista Sara Herranz 

La botella y la mascarilla propuesta por Sara Herranz

La botella y la mascarilla propuesta por Sara Herranz

En el marco del Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, la firma Solán de Cabras continúa impulsando su apoyo a las mujeres que luchan contraestaenfermedaden colaboración con la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), que este lunes conmemoraba el día del Cáncer de Mama.

Así, la marca de agua mineral lanza unaedición especial limitadade subotella rosa –color simbólico a nivel internacional de laconcienciación sobre el cáncer de mama–, con la que poder contribuir a visibilizar y recaudar beneficios para esta causa adquiriéndola en  www.tiendasolana.com/agua.

Esta y otras iniciativas se engloban en la campaña #GotasdeSolidaridad, con la que Solán de Cabras aporta visibilidad y muestra su apoyo a los pacientes en esta lucha porséptimaedición. Además, este año para reforzar su compromiso con las pacientes y sus familiares, Solán de Cabras ha creado en colaboración con la ilustradora Sara Herranz y la AECC un material divulgativo con unas claves que destacan la importancia el bienestar emocional en personas quepadecen cáncer de mama. También la ilustradora ha diseñado un amascarilla tematizada para mostrar apoyo.

La ilustración divulgativa representa consejos y claves que buscan normalizar los diferentes estados de ánimo por los que pasan las pacientes y aportar naturalidad, comprensión y entendimiento. Además,es importante dar la consideración necesaria al apoyo que brindan familiaresy amigos, pero también la importancia de respetarlasoledad e intimidad, que permite la escucha y el autocuidado.

Estas claves,aportadas por la Asociación Española Contra el Cáncer(AECC), han sido representadas a través de diferentes mujeres pacientes de cáncer de mama, realizando acciones cotidianas en las que están conectadas con los demás, pero también con ellas mismas.

“Me parecía interesante normalizar escenas cotidianas de su día a día, como, por ejemplo, ese gesto de pintarse las cejas frente al espejo, la posibilidad de disfrutar demomentos de intimidad y soledad, y a la vez representar el apoyo emocional de su entorno", propone Herranz.

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