El BMW iX3 es un SUV eléctrico integrado en la familia X3 de 4,73 m de largo, con un motor de 286 CV, siempre de tracción trasera y con una batería de 80,0 kWh de capacidad con la que es posible homologar una autonomía de 458 km (WLTP). Su precio arranca en los 72.300 euros.
Los BMW iX, sin embargo, serán diferentes. Por un lado, estos SUV serán más grandes, puesto que medirán unos 5,00 m de longitud. Tendrá, si nos atenemos a lo que dice BMW “proporciones son comparables a las del BMW X5 en longitud y anchura y con el BMW X6 por altura, además de presentar unas ruedas que, por tamaño, recuerdan al BMW X7”. Un BMW X5 mide de largo 4,94 m y un X7, 5,15 cm, así que estará más cerca del primero que de segundo. Su Cx es de 0,25, de modo que mejorará al de sus dos rivales más directos: el Mercedes EQC y el Audi e-Tron, con 0,29 y 0,28 respectivamente.
Sólo eléctrico
Lo que le hará verdaderamente diferente de esos BMW X5 y X7; y más parecido al BMW iX3, es que el iX -sí, así, si numeral- es exclusivamente eléctrico. Le corresponde a él usar una plataforma exclusiva y distinta a la CLAR como la que estrenó el BMW Serie 7 en 2015. Es hoy la que usan la mayor parte de los modelos de la marca, X3 incluido.
Por otro lado, la de los BMW iX no es exactamente la que tendrán los coches eléctricos de BMW a partir de 2025, ésta sí totalmente nueva. Sin embargo, en su específico chasis se emplea aluminio con CFRP, plásticos reforzados con fibra de carbono que en algunos lugares sustituye al acero, con el objetivo de conseguir el menor peso posible.
En cuanto a la arquitectura eléctrica que se le integra es la que BMW denomina “quinta generación” por la integración de los motores, electrónica de potencia y transmisión, además de las baterías “de última generación”, según la marca.
Fabricado en Dingolfing (Alemania) en sus motores no se emplean tierras raras y materiales como el cobalto o litio de las baterías han sido extraídos supervisadamente, de forma transparente y sostenible. BMW hace mucho hincapié en que, además, la huella de carbono del ciclo vital del coche es muy baja, para lo que se certifica la producción de las baterías con energía renovable y para el trabajo del aluminio, por ejemplo, se recurre a energía solar. También emplea muchos elementos naturales y reciclados, estos últimos, plásticos o aluminio; mientras que la madera está certificada.
La versión más potente es la iX xDrive50. Con una potencia máxima de 500 CV acelera de 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos y tiene una autonomía de más de 600 km (WLTP). La que lo es menos, la iX xDrive40 rinde unos 300 CV y acelera en la misma prueba en 6 segundos, con 400 km de alcance. En ambos casos, tienen un motor eléctrico en el eje delantero y otro en el trasero, por tanto, con tracción total. El consumo provisional es de 20 kWh/100 km en la versión de 300 CV y 21 en la de 500 CV.
En este último, la batería tiene una capacidad bruta de 100 kWh, por los 70 de las del iX xDrive40. En el primer caso es posible utilizar cargas con corriente continua de hasta 200 kW -de 10 al 80 por ciento de la capacidad en 40 minutos-, mientras que en el segundo esa potencia puede ser de 150 kW. Con corriente alterna pueden recurrir a 11 kW gracias al uso de un cargador trifásico.
En cuanto a la frenada regenerativa, BMW sólo dice que podrá adaptarse automáticamente a las condiciones del tráfico, como ya hacen otros modelos como los de Hyundai, además de que podrá ajustarse a través de un mando a los gustos del conductor.
Techos, equipos de sonido y pantallas sorprendentes
Tendrá cinco plazas, un techo panorámico electrocrómico de gran tamaño opcional -el más grande jamás instalado en un BMW y hecho de una única pieza- y su habitáculo carecerá de túnel central. En su salpicadero, con la denominación Curved Display se agruparán dos pantallas desprovistas de marco, una de 12,3” para la instrumentación -también tendrá un Head Up Display proyectado sobre el parabrisas- y otra de 14,9” para el resto de controles. El volante será hexagonal y multifuncional, además de calefactado con tres intensidades distintas.
En cuanto al equipo de sonido, el mejor de los disponibles en los BMW iX será un Bowers & Wilkins 4D con 30 altavoces -ocho de ellos integrados en los reposacabezas delanteros y traseros- y 1.615 vatios. También habrá uno Harman Kardon de 18 altavoces y 655 vatios y, aún, una versión más básica con 12 altavoces y 205 vatios.
BMW ya ha anunciado los precios, que arrancan en 85.850 euros en el caso del xDrive40, por los 102.600 del xDrive50.
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