El presidente chino, Xi Jinping, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, se reunieron por sorpresa en Dalian, el segundo encuentro en menos de dos meses, para abordar los últimos progresos logrados antes de la esperada e histórica cumbre de Kim con Donald Trump.

El encuentro tuvo lugar entre ayer y el lunes en esta ciudad portuaria en el noreste de China y bajo un gran secretismo, como ya ocurrió con la también inesperada visita de Kim a Pekín en marzo.

Uno de los temas centrales fue la desnuclearización de la península y las negociaciones que Pyongyang mantiene con Seúl y Washington al respecto. Xi volvió a mostrar su apoyo a la voluntad de Pyongyang de eliminar las armas nucleares de la península y su predisposición a mantener conversaciones con EEUU.

Por su parte, el Ministerio de Energía surcoreano confirmó que ha diseñado un plan para construir centrales eléctricas en el Norte destinadas a solventar sus problemas energéticos en caso de que emprenda su desnuclearización.