El cantante Antonio Orozco ofrece el próximo sábado a las 22 horas un concierto en la plaza de Toros de Roquetas de Mar. El artista llega a tierras almerienses con su gira Destino. Esta encantado de regresar a una tierra donde tiene tantos seguidores y donde se siente como en casa. El sábado hará su extenso repertorio en un concierto que se prevé reúna a cientos de personas.

Orozco lleva unos años fascinantes cosechando muchos éxitos en la música. "Realmente estoy muy contento de lo que me está pasando en los últimos tiempos, me están pasando muchas cosas buenas y siendo honesto tengo que decir que las cosas no me han ido nunca mal, siempre hemos ido tirando para adelante. En los últimos años es cierto que todo ha ido mucho mejor", apunta el artista.

El cantante aparte de la suerte es un hombre muy trabajador y honesto y el público siempre lo ha premiado. "Ni soy tan bueno como parezco ni tan malo como pueda parecer. En realidad, de lo que se trata es de vivir tu trabajo con mucha intensidad y respeto. La vida a veces no te lo pone fácil, y a veces parece que le perdemos el respeto a la vida, y no nos damos cuenta cuando tenemos trabajo. Yo soy un tipo con suerte".

Orozco que tiene una carrera artística muy brillante ha visto potenciada su fama y popularidad por la televisión al formar parte del jurado de un programa musical de Tele 5. "La televisión tiene un doble filo, porque te puedes sentar en un sillón y puedes gustar o no. Nunca preparé ningún personaje y en todo momento he sido yo. La televisión me ha dado un reconocimiento, y sobre todo ha servido para conocerme mejor".

"Muchos pensaban que yo era un tipo oscuro, que era poco risueño y es todo lo contrario. Soy bastante irónico en mi forma de vivir y de escribir. Lo que la gente si ha detectado es la honestidad. Nunca en la vida he tenido la desfachatez de hacerle daño a nadie hablando y si en alguna ocasión alguien sufrió ese daño, fue sin darme cuenta. Y si no lo he hecho en la vida, no lo voy a hacer en la televisión", mantiene el popular cantante.

El artista que se considera un rockero, mantiene que sus primeros éxitos fueron baladas. "He sido rockero desde pequeño. Tuve la suerte de que las primeras canciones que pegaron mías fueron baladas, pero mi espíritu siempre ha sido rockero".

El intérprete está obsesionado con el tiempo. "No tengo forma de poder controlar ni el tiempo ni la distancia. Es un desvarío profundo de un escritor mediocre como soy yo. Mi lucha es ganarle tiempo al tiempo". Orozco regresa y lo hará a lo grande. Promete darlo todo en el escenario, para que el público salga satisfecho de haber ido a escucharlo.