La alegría del folclore latinoamericano fue el sábado la protagonista de la noche en el Teatro Apolo con un programa doble en el que participaron los almerienses Nuevos Aires y los canarios Troveros de Asieta. Con el patrocinio del Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Almería y del Área de Cultura y Cine de Diputación Provincial, ambas formaciones realizaron un recorrido por los sonidos latinos, con canciones por todos conocidos, que deleitaron a los asistentes, dentro de la cultura segura.

El concierto comenzó con Nuevos Aires, que arrancó al ritmo del bolero Idilio, para continuar con el ritmo tropical de Mi bendición. El momento central fueron las reconocibles letras de Los Panchos, un referente del folclore latino. Con el público entregado, hicieron una declaración de amor con Querría, pura poesía cantada en las maravillosas voces de ‘Nuevos Aires’.

Sorprendieron con la versión de Corazón partío de Alejandro Sanz, y en el tramo final llenaron el Teatro Apolo con el son cubano de Lágrimas negras de Compay Segundo, y concluyeron con una declaración al público, Tú sí sabes quererme. Aplausos para el ritmo latino de diferentes épocas en las versiones corales nacidas en Almería.

Tras el descanso llegó el momento de subir el ritmo con los canarios Troveros de Asieta, conjunto fundado en 1991 en La Palma (Islas Canarias) con el decidido propósito de homenajear el legado de los inmigrantes que viajaron entre Canarias y Cuba.

Las influencias musicales del grupo se traducen en un repertorio que va desde el folclore cubano, al son, guaracha e, incluso, latin jazz, como demostraron en su actuación en Almería, dentro del programa de otoño del Área de Cultura del Ayuntamiento de la capital, y, en este concierto, apoyados por el Área de Cultura y Cine de la Diputación Provincial. Fueron un total de catorce canciones llenas de son y ritmo, y que comenzaron con salsa de la buena y temas como Alegre petición y Consuélate como yo, donde la percusión juega un papel relevante, para bajar la intensidad y ponerse románticos con La flor y la hoja seca.

Continuaron con Mi tambor, La negra tomasa y Sonero soy, temas de ida y vuelta, del viaje musical entre Canarias y Cuba, e intercalando entre ellos la belleza de ‘Mucho corazón’, un bolero que interpretaron con maestría como hace uno de sus maestros, el mexicano Luis Miguel.

Era una noche para bailar emocionalmente (siempre sentados por las medidas se seguridad sanitaria) y es lo que quisieron transmitir Troveros de Asieta con el son Soltando chispas. En el tramo final interpretaron Silencio, Son apretaito, La rumba soy yo y A toda Cuba gusta. Para concluir, en los bises con Montuno y Cuentas claras.

La alegría, el amor y el ritmo latino fueron la vacuna para el espíritu en los actuales tiempos convulsos, siempre con estrictas medidas de seguridad. La música alimenta el alma dentro de la cultura segura. Hay que agradecer el trabajo realizado por el grupo Nuevos Aires para preparar esa noche de música latina para el disfrute de todos.