El pasado 17 de enero de 2022 el Real Conservatorio Profesional de Música de Almería (RCPMA) celebró la Final de su VIII Concurso Manuel del Águila de Jóvenes Solistas en el Auditorio Maestro Padilla de Almería, patrocinado por Cajamar. En la categoría A, el primer premio fue para el pianista José Carlos Esteban-Hanza y el segundo premio para el violinista Pablo Acebedo. En la categoría B, el primer premio fue para el clarinetista Luis Lozano y el segundo premio fue para el pianista Antonio Robalo.

Esta octava edición del Concurso, correspondiente al curso 2020/21 y patrocinada una vez más por Cajamar, tuvo su primera fase el pasado 17 de marzo de 2021, tres meses más tarde de su fecha habitual debido al retraso acumulado de la edición anterior por causa del confinamiento y de las restricciones derivadas de la pandemia de la COVID-19.

Por la misma razón la Final se hizo esperar también unos meses, que merecieron la pena por el magnífico espectáculo que ofrecieron los cuatro finalistas, jóvenes y brillantes músicos de entre 16 y 18 años, alumnos del Conservatorio de Almería.

Tanto es así que el jurado, presidido por el pianista, profesor y director de orquesta Francisco Alonso, actual director del Instituto de Estudios Almerienses (IEA), manifestó la gran dificultad que supuso el emitir el fallo, debido al altísimo nivel musical demostrado tanto por los solistas como por la Orquesta y por la Banda del Conservatorio, ambas dirigidas brillantemente por el profesor Francisco Román.

En la categoría B (3º y 4º de Enseñanzas Profesionales) se presentaron al público Antonio Robalo (Piano) y Luis Lozano (Clarinete). Robalo interpretó el primer movimiento del Concierto para Piano y Orquesta nº 24 de Mozart, que abordó con brillantez y transparencia, logrando momentos de gran dulzura a la vez que bordaba los muchos pasajes de virtuosismo.

En especial quitó el aliento con la cadencia, compuesta por él mismo al estilo de los grandes músicos, con su personal toque compositivo y llena de pasajes endiabladamente difíciles.

Por su parte, Luis Lozano interpretó el complicadísimo Concierto para Clarinete y banda del joven aunque consagrado compositor Óscar Navarro. En las primeras notas ya dejó ver la extraordinaria musicalidad y control del sonido de que hace gala, lanzándose con valentía hacia las complejidades rítmicas y efectos como frullatos o glisandos en las que se mueve con absoluta naturalidad. Su capacidad y fuerza expresiva, realzadas por una banda perfectamente sincronizada, le llevó a cotas musicales que finalmente le dieron el primer premio de su categoría.

En la categoría A (5º y 6º de Enseñanzas Profesionales) se veían las caras Pablo Acebedo (Violín) y José Carlos Esteban-Hanza (Piano). Pablo Acebedo interpretó las difíciles Danzas Rumanas de Bartók y el Preludio y Allegro de Kreisler, donde consiguió momentos de gran belleza a la vez que resolvía con bravura y gran sonido los pasajes virtuosísticos, gracias a su magnífica técnica y gran soltura.

Cerró la Final-Concierto José Carlos Esteban-Hanza, que interpretaba el primer movimiento del Concierto para piano y orquesta op. 54 de Schumann, en arreglo para Banda Sinfónica. El joven pianista ofreció una magnífica y profesional versión, llena de pasión y de fuerza, haciendo gala de un gran sentido musical y de una desenvoltura en el escenario inusuales para su edad, en continuo diálogo con la banda y con el director, a quienes no quitaba ojo.

Finalmente se alzó con el Premio de la Categoría A, que viene a sumar a otros recientes galardones, como el de ganador del concurso “Tierra de Talento” de Canal Sur, que conquistó el año pasado en su faceta de pianista flamenco, donde también empieza a brillar.

Los cuatro músicos proporcionaron una magnífica tarde de música y dejaron vislumbrar el prometedor futuro que les aguarda. Se lo pusieron muy difícil al Jurado. Este estuvo compuesto por Francisco Cortés y Pilar Jerez como representantes de la Asociación Manuel del Águila y de la AMPA del Conservatorio, respectivamente, Manuel Horcas (trompetista y Director de Banda), María Krohn (violinista) y el mencionado Francisco Alonso. Todos, acompañados por la Directora del Conservatorio, María del Mar Oyonarte, y por el responsable de negocio de Cajamar para la provincia de Almería, Antonio Rubio, como representante de la principal entidad patrocinadora, subieron al escenario para hacer la entrega de premios.

El Concurso de Jóvenes Solistas se viene celebrando desde el año 2013. Su objetivo es impulsar el desarrollo artístico de los alumnos de Enseñanzas Profesionales del Conservatorio almeriense, haciendo posible para ellos una experiencia tan atractiva como es tocar como solistas con una orquesta o con una banda. En este sentido, el nombre de “Manuel del Águila” no es casual, ya que en colaboración con la asociación del mismo nombre se quiere conmemorar y evocar la figura del filántropo almeriense, quien fue adalid de la juventud y de las artes en nuestra ciudad.

El Concurso se ha convertido, tras nueve años de andadura, en una cita imprescindible de la nutrida agenda musical y formativa del Real Conservatorio Profesional de Música de Almería, centro público con 40 años de trayectoria que, por la profesionalidad y solvencia de sus casi 100 profesores y gracias a la dedicación y talento de sus 1100 alumnos, constituye el escaparate del mejor nivel de la formación musical en nuestra provincia.

Este evento cuenta actualmente con el patrocinio de la citada Asociación Cultural “Manuel del Águila” y de Cajamar, así como con la colaboración de las casas de Música Ritmo y Asensio, de la AMPA “Santa Cecilia” del Conservatorio de Música y con el apoyo del Ayuntamiento de Almería, que cede amablemente el Auditorio Maestro Padilla para su celebración.