Cultura

Els Joglars cumple las expectativas con 'El coloquio de los perros' en El Ejido

  • La compañía catalana presentó este montaje el sábado en el Teatro Auditorio Soberbio Ramón Fontseré que interpretaba a uno de los perros

Els Joglars cuando se sube al escenario no deja indiferente a nadie. La compañía catalana presentó el sábado en el Festival de Teatro de El Ejido el montaje El coloquio de los perros, una adaptación libre de la novela de Miguel de Cervantes donde también participa la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

La obra cuenta la historia de los viejos perros Cipión y Berganza que a lo largo de su periplo han observado desde su mudez toda la condición humana, toda la miseria, todo lo ridículo de los bípedos, y antes de que se les acabe la noche y les desaparezca el don del habla cuentan la realidad auténtica: que los lobos son los pastores, que la defensa ofende, que las centinelas duermen, que la confianza roba y el que os libera os mata.

La compañía regresaba una vez más a El Ejido con un montaje que desde el principio hasta el final tiene al espectador totalmente pendiente de lo que ocurre sobre el escenario. La apuesta del Festival Ejidense por Els Joglars era hacerlo por un teatro distinto, que rompe con lo convencional y que juega intensamente con la metáfora.

La adaptación de la obra de Cervantes es fantástica, contando con el sello tan personal de esta compañía. La obra se sucede en una noche en una perrera. Manolo, el vigilante, descubre como dos perros, Cipión y Berganza, hablan en verso con él y le van contando sus vivencias en su intensa vida.

La conversación no es fácil, por momentos resulta extremadamente dura, ya que los perros van contando al vigilante el comportamiento que han tenido sus amos, siendo en algunos momentos crueles, en otros interesados, en otros ridículos y otras veces mostraron cierta bondad, pero en pocas ocasiones. De esta manera se pone en entredicho el comportamiento de los humanos con respecto a estos dos perros.

Una serie de personajes van desfilando ante los perros, donde se van produciendo una serie de reflexiones, algunas de mucho calado que además tocan algunos temas de actualidad como la corrupción. En la obra hay momentos muy divertidos y momentos muy duros.

Pero en el fondo es una compañía que estudia perfectamente los gestos, que comunica con el espectador con facilidad y que además hace teatro con mayúsculas. El montaje refleja perfectamente una vida de perros que un buen día tienen el don de poder hablar y contar su vida.

Ramón Fontseré y Pilar Sáenz son los dos perros que tienen una interpretación memorable. Xevi Vilà es Manolo que realiza un papel fundamental en este montaje. Tiene una gran capacidad interpretativa. En El Ejido, el público salió de la función satisfecho, ya que se cumplieron las expectativas en torno a Els Joglars.

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