Cultura

Javier Sierra: "Seguiré haciendo lo que me gusta, que es sorprender al lector"

  • El escritor presentó ayer en el Centro de Cultura de Cajamar su última novela 'El maestro del Prado' ante decenas de personas

La presencia de Javier Sierra ayer en el Centro de Cultura de Cajamar levantó una gran expectación. El autor, considerado como uno de los grandes maestros de la narrativa actual, presentó su última obra titulada El maestro del Prado, una novela original que invitaba al público a recorrer las salas del Museo del Prado descubriendo los misterios y secretos escondidos en algunas de sus obras más conocidas.

"He construido una novela donde he utilizado un episodio que yo viví en primera persona en el año 1990 cuando llego a Madrid, que fue el encontronazo con un señor mayor dentro de las galerías del Museo del Prado, que una tarde se ofreció a explicarme las claves del cuadro La Perla de Rafael", explicaba ayer Sierra.

El propio autor mantiene que "El maestro del Prado es el más peculiar de mis libros, casi tiene intriga y misterio pero también tiene una parte de biografía y una marcada vocación didáctica. He querido aproximar el arte desde una vertiente emocional al lector y se ha producido un milagro, ya que de repente muchos lectores que no tenían una predisposición hacia el mundo del arte se han sentido cautivados y están visitando por primera vez una pinacoteca. Ese es el milagro de este libro, que está haciendo a muchas personas que se interesen por el arte, ya que pensaban que el arte era sólo para las élites", subraya el escritor.

La novela dado el éxito de ventas y las buenas críticas recibidas ha sorprendido a su propio autor. "Yo pensé que este iba a ser un libro maldito mío. La pasión mía por el arte viene de muy antiguo. Al ser una construcción literaria peculiar puesto que es el diálogo entre un maestro y un alumno pensé que no iba a tener un gran impacto. Y sin embargo ha sido todo lo contrario. Por lo tanto la primera sorpresa ha sido la enorme aceptación. Y después de esa sorpresa ha venido el análisis. Yo estoy todavía analizando por qué ha tenido este éxito".

"Mis novelas anteriores han abordado enigmas que son más o menos exóticos, que tienes que salir del país para encontrarlos, mientras en El Maestro del Prado toda la temática está en Madrid, al alcance de cualquiera, a los ojos de todo el mundo", sostiene Sierra. En este sentido, el escritor cuando se dispuso a escribir la novela se centró totalmente en dos obras del Museo del Prado que le marcan. "Uno es La Gloria de Tiziano, encargo de Carlos V a este pintor italiano. Se representa el reino de los Cielos donde aparece Carlos V cubierto por un sudario pidiendo permiso para entrar en la gloria".

"La otra obra clave para esta novela fue El Jardín de las Delicias de El Bosco. Siempre se ha interpretado desde una óptica católica y romana y sin embargo, es todo lo contrario, es el manifiesto de una secta milenarista que esperaba el fin del mundo para el año 1600. Descubrir que hay cuadros que nos los han interpretado casi en el sentido opuesto al que el autor le dió, también fue un aldabonazo importante para escribir esta novela. He querido recuperar el sentido original de algunos cuadros del Museo del Prado", explica Sierra.

El escritor nacido en Teruel ha visitado en varias ocasiones el Museo del Prado y siempre que aparece por la pinacoteca comenta que se producen dos hechos. "He encontrado al lector con el libro debajo del brazo viendo uno de los cuadros que aparece en la obra y discutiendo y comentando el cuadro, lo cual me parece maravilloso y por otro lado, un hecho emocionante, porque el libro está dedicado a los vigilantes de sala del Museo, y cuando voy es rara la vez que no me aborden algún vigilante y me dé las gracias por haberme acordado de ellos".

Sierra anuncia alguno de sus nuevos proyectos. "En el futuro quiero seguir siendo yo, y no voy a considerar el éxito de las anteriores. Voy a seguir haciendo lo que más me gusta que es sorprender al lector y ojalá haya muchos lectores que quieran seguir sorprendiéndose conmigo".

"Me gusta definirme como el escritor de las grandes preguntas. Me gusta que la literatura esté al servicio de la historia" apuntó el novelista.

"No busco lectores, busco cómplices que conviertan la literatura en una pasión y se queden con ganas de descubrir y viajar; por eso en mis novelas dejo todas las fuentes y pistas que he utilizado. En 'El maestro del Prado' hay casi 100 notas que justifican mis conclusiones", añadía Sierra ante un salón de actos repleto de público.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios