La Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía no podrá utilizar la marca Cortijo del Fraile,  ya que está registrada en la Oficina Española de Patentes y Marcas por la empresa Berkshire Hathaway del almeriense Antonio Herrera Luque. En el año 2008, Herrera viendo que el Cortijo del Fraile se caía a trozos decidió registrarlo. “Me di cuenta que el Cortijo iba a desaparecer y opté entonces por registrar el nombre. Me dije el Cortijo desaparecerá, pero el nombre perdurará”.

“Mis abuelos eran de Barranquete, una barriada de Níjar, muy cercana al Cortijo del Fraile y conozco la zona como la palma de mi mano. Yo hace años que al Cortijo del Fraile le llamo el Cortijo del Olvido, porque nadie ha hecho absolutamente nada por restaurar una pieza fundamental del campo de Níjar. El cortijo aparte de su historia es un testigo excepcional del paso del tiempo durante 200 años. Creo que habría que darle un uso totalmente cultural y hacer algo porque no desaparezca”, argumenta Antonio Herrera.

El caso es que cuando Herrera decide registrar el nombre del cortijo se extrañó de que nadie antes hubiera pensado en ella, ni siquiera las instituciones. Hace dos años estaba dispuesto a cederle el nombre de forma totalmente gratuita a la Junta de Andalucía, pero en este tiempo no se han dignado ni siquiera en llamarme”, afirma Herrera.

 “Eso indica la dejadez a que esta sometido este inmueble. Ahora vienen a decir otra vez que lo van a declarar Bien de Interés Cultural. Cada vez que se mueve algo sobre el Cortijo, la Junta anuncia siempre lo mismo”, apunta el gerente portavoz de la empresa Berkshire Hathaway, dedicada a la investigación en la agricultura.

El Cortijo es conocido internacionalmente por ser el escenario donde tuvieron lugar los hechos reales en 1928 que llevaron a García Lorca a escribir ‘Bodas de Sangre’. La página web del Cortijo ha hecho que este inmueble sea conocido en muchos países. De hecho, Herrera tiene claro que “la página web que tengo ha servido para que se interesen desde Moscú hasta Nueva York, pasando  por Francia, Italia, Alemania, etc”.

 La sorpresa para Antonio Herrera ha sido que ha recibido una oferta para comprarle la marca que ha llegado desde Denver. “Hay un señor que fue asistente de dirección en el rodaje de varias películas en Almería que está interesado en adquirirla y que me pagaría por ello unos 6.000 dólares. No es mala oferta, puesto que yo me gasto mucho dinero al año en mantener la pagina”.

“Pero vamos no hago esto pro motivos económicos ni mucho menos, simplemente me ha llevado a registrar esta pagina con el fin de hacer una llamada de atención sobre la situación del cortijo. “Creo que las Administraciones deben de hacer algo por el Cortijo y convertirlo en un centro cultural, donde se represente la obra Bodas de Sangre. Creo que eso seria muy importante para Níjar y para Almería”, concluye Antonio Herrera.

El cortijo del Fraile fue construido en el siglo XVIII por los frailes del Convento de Santo Domingo de Almería para atender a los cultivos de olivos y cepas de vino. A partir del siglo XIX dejó de pertenecer al clero.

A partir de los años 60, El Cortijo del Fraile fue utilizado como localización cinematográfica en películas del oeste, como El bueno, el feo y el malo, Yo soy la revolución, Tiempo de buitres, Los cuatro truhanes o Agáchate maldito. Sin duda, el Cortijo sería una pieza fundamental en la vida del Parque Natural Cabo de Gata-Nijar de cara al futuro.